Ignacio Ruiz

Cabalito

Ignacio Ruiz


Todo por un euro

21/09/2019

La demagogia antidemocrática se ha hecho con el poder en las redes sociales. No hay día, red social o grupo de whatsapp que no haya sido abducido por los antisistema. Nadie está libre de culpa, todos dependemos de Murdoch y sus redes.
Ese demagógico movimiento que flirtea con el cambio de sistema de gobierno, conduciéndonos a una anarquía sistémica ingobernable y proclive a fake news. Son coincidentes con las ideas de izquierda radical, y ultraderecha.
Que me borren del mailing, dice la gente a voces por los grupos de whatsapp, no quieren ver carteles electorales, ni quieren políticos en las instituciones, ni quieren política en su vida. ¿Quieren anarquía o dictadura?
Esto es fruto de una sociedad edulcorada. Nos gustan las cosas mezcladitas, que tengan mucho de sifón y poco de vermú. Mucho de burbuja y poco de sustancia. Mucho de chispitas, pero poco de poso.
Que lo único que se van a ahorrar en total, por votante, será un euro, a lo sumo dos, en propaganda y mailing electoral. No son 140 millones en papeletas, por habitante es todo a un euro. Pero preferimos la memez y la demagogia, la incoherencia y la soflama, en lugar de la responsabilidad. La culpa de todo no es de la papeleta, si no del papelón que hacen algunos.
Pero un euro tiene mucho valor. Por un euro se vendió un banco, Rivera’s encuentra sus cambios de pensamiento en bazares de todo a un euro. Sánchez, de concierto en Falcón, nos sale a un euro. Las camisas de supermercado de Iglesias antes eran a 1 euro, en sus armarios de Galapagar ya no.
Es más fácil echar el cerrojazo a la libertad de información, inocua y neutra del sistema democrático. Pues eso, estalinismo puro y duro. ¿Prefieren la justicia de Escobar y su serie Narcos, plata o plomo? Mientras una multa de velocidad o aparcamiento será un atropello.
Todo este jaleo por un euro. De los céntimos de más que nos cobran por litro de gasolina, nos callamos. De la tasa de basuras extra, agachamos la cerviz. Eso sí, las papeletas para poder informar a los ciudadanos, en mi casa no, que da cosita.
Así nos pasará, echaremos de menos nuestro sistema democrático, nuestras instituciones, y sobre todo nuestras libertades.