El vacuno de leche de Talavera y comarca protesta en Madrid

Lola Morán Fdez.
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Los ganaderos se han desplazado para seguir reivindicando ante el Ministerio de Agricultura unos precios justos, dado que los actuales se sitúan por debajo de los costes de producción

El vacuno de leche de Talavera y comarca protesta en Madrid - Foto: L.T.

El vacuno de leche de Talavera y comarca participa en la protesta que está teniendo lugar este jueves ante el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en Madrid para seguir reivindicando precios justos para el sector. Hasta allí se han desplazado una veintena de tractores, transportados en camiones góndola, así como alrededor de 150 personas, algunas a bordo de un autocar fletado hasta la capital española y otros en vehículos particulares.

Todos ellos se han sumado a esta nueva concentración del sector del vacuno de leche bajo el lema 'SOS sector lácteo' con el fin de denunciar que «la pasividad del Ministerio arruina al sector» y llaman a la unidad «por un precio que cubra los costes de producción».

La protesta cuenta con el apoyo de la Agrupación de Ganaderos de Talavera y Comarca (AGATA) así como de la Plataforma 'Basta ya de abusos' de Talavera y comarca, dos de las entidades participantes en esta concentración convocada de la mano de la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, junto con las organizaciones OPL del Sur  y OPL Nacional.

Con esta nueva acción,  quieren denunciar «cómo el Ministerio, aun sabiendo perfectamente la situación que está atravesando la ganadería de leche, no ha hecho más que hacer alguna reunión y, en el último momento, anunciar medidas que, a juicio de las organizaciones, como tantas otras veces, quedarán en papel mojado».

Desde la organización recalcan que, desde que comenzara 2021, los costes de producción del sector lácteo no han hecho más que incrementarse vertiginosamente, lo que, ante la irresponsabilidad del resto de eslabones de la cadena del sector lácteo, no se repercutió en subidas en el precio pagado al productor. Por ello, el sector «se vio abocado a salir a las calles para reclamar lo que una cadena agroalimentaria en buen funcionamiento debería ser lo normal: que los precios pagados repercutan el coste de producción».