El Gobierno de Castilla-La Mancha sacó ayer adelante en las Cortes los presupuestos generales para el próximo ejercicio, y el Consejo de Gobierno dio luz verde a la ley que los acompaña, la ley de medidas administrativas, financieras y tributarias que recoge hasta seis deducciones fiscales «para facilitar y favorecer a las familias con rentas más bajas, pero también a las clases medias frente a la inflación y para fomentar la inversión empresarial», según explicó el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina. Entre ellas se integran deducciones de hasta 200 euros para la adquisición de productos de la cesta de la compra, y tratar de mitigar así la elevada inflación que nos ha acompañado las últimas semanas.
Las ayudas serán de 200 euros para las bases imponibles inferiores a los 12.500 euros, con un incremento de 50 euros por hijo o descendiente, 150 euros con una base imponible inferior a 21.000 euros incrementándose en 37,5 euros por cada hijo o descendiente, y 100 euros con una base imponible inferiores a 30.000 euros, con 25 euros más por hijo o descendientes. De esta forma el consejero aseguró que se llega no solo a las personas y familias más vulnerables, sino también a las clases medias alcanzando al 87% de los contribuyentes de la región.
Además, otra de las deducciones afecta a los gastos de guardería, que se duplica pasando de 250 a 500 euros, y también la correspondiente a adquisición de libros de texto y enseñanza de idiomas, que va a llegar ahora hasta el nivel universitario y van a poder incluirse también los gastos por clases particulares o el acceso a Internet. Se amplían también los gastos por estudio y residencia cuando ésta esté fuera del lugar de residencia de la familia.
Por otro lado informó de una deducción en el IRPF para las personas menores de 40 años para compensar el incremento de los tipos de interés en préstamos hipotecarios de tipo variable para la adquisición de la primera vivienda habitual, con 150 euros para bases imponibles inferiores a 12.500 euros, o 100 euros para bases inferiores a 27.000.
Ruiz Molina detalló además las nuevas medidas relacionadas con la actividad económica, como deducciones del 20% –con un límite de 4.000 euros– por adquisición de acciones y participaciones por la constitución o ampliación de capitales de empresas y por inversión en entidades de economía social. El consejero fijó el total aproximado de todas estas deducciones en 85 millones de euros.