El Gobierno de Castilla-La Mancha ha condenado esta mañana el repunte de asesinatos machistas del último mes, tras la finalización del estado de alarma y ha hecho un llamamiento a la unidad de instituciones, partidos políticos y sociedad para acabar con la violencia de género.

Así lo ha indicado la directora del Instituto de la Mujer, Pilar Callado, durante la concentración de protesta contra la violencia de género celebrada este sábado en Almansa, en la que ha mostrado la «rotunda condena del Gobierno regional a esta violencia que no cesa y que destroza y arrebata día a día la vida de muchas mujeres, sus hijas e hijos».

Del mismo modo, Callado ha condenado sin paliativos la violencia vicaria y ha recordado que, «desde el año 2013, 39 niñas y niños, han sido asesinados por sus padres con el único objetivo de hacer daño a las madres».

Por eso, desde el Gobierno de Castilla-La Mancha «rotundamente decimos no a la violencia machista y no a la violencia vicaria», ha afirmado Collado, que se ha referido a la Ley para una Sociedad Libre de Violencia de Género, aprobada en el año 2018 en Castilla-La Mancha, que recoge la violencia vicaria e incluye a las y los menores como víctimas de violencia de género.

Asimismo, la directora ha hecho un llamamiento a la «unidad a todas las instituciones, a todos los partidos políticos, a toda la sociedad en general» y ha significado que «tenemos que estar unidos para condenar la violencia de género, porque la violencia de género existe», y porque esa unanimidad es la manera más eficaz para proteger a todas las víctimas.

Y ha insistido en la necesidad de «condenar discursos que niegan y cuestionan la violencia machista, ya que desprotegen a las víctimas mientras empoderan a los maltratadores».

Desde el año 2003, cuando comenzó a haber registros, 1.096 mujeres han sido asesinadas en España por sus parejas o exparejas, 48 de ellas en Castilla-La Mancha.