El brutal asesinato de un joven de 21 años en el Polígono con la excusa del robo de diez euros ha encendido las alarmas en Toledo. El temor y la inseguridad de andar a ciertas horas de la noche se ha agudizado en una ciudad, como la capital castellano-manchega, que cuenta con un índice de criminalidad muy por debajo de la media nacional, y en la que no se cometían crímenes violentos con resultado de muerte desde antes de la pandemia.

«En Toledo nunca ocurre nada. Es una ciudad tranquila» era hasta hace poco el mantra de seguridad que se repetía entre vecinos y visitantes, pero desde el fin de semana del puente de Todos los Santos, y los sucesos acaecidos tanto en la ciudad como en el resto de España, han puesto en alerta a los toledanos y alimentado todo tipo de rumores.

Así, en la tarde del pasado viernes comenzó a circular en las redes sociales y en el teléfonos móviles un mensaje en el que se informaba de sendos intentos de secuestro. Se trataba, supuestamente, de un grupo indeterminado de personas que iban en un vehículo de la marca Peugeot, modelo 206 («de los viejos», recalcaban) que entre las 14:30 y las 15:00 horas de ese mismo día habían intentado secuestrar a una chica en la estación de autobuses y a una mujer en el cercano aparcamiento de Safont.

Fin de semana de bulos y psicosisLos hechos son tan alarmantes que muchos toledanos los dieron por ciertos, aunque la Policía Nacional ha confirmado a La Tribuna que no se ha producido ninguna denuncia de casos similares en sus dependencias, lo que debido a la gravedad de los hechos es imposible que no hubiera sucedido.

Por ello, fuentes del departamento de prensa de la Policía Nacional de Toledo no dudan en señalar que «no hay ningún hecho denunciado como intento de secuestro en la ciudad», ni ese viernes ni hasta el día de ayer, por lo que no queda más remedio de dar al supuesto aviso la categoría de bulo.

Tampoco la Guardia Civil de Toledo tiene constancia de otro mensaje de alerta que lleva mucho más tiempo circulando en internet y Whatsapp. Se trata de una advertencia que, principalmente, ha corrido como la pólvora en los colegios. En ella se advierte de que hay un hombre merodeando por la zona de Toledo, «sobre todo en los pueblos de alrededor» con la supuesta intención de «secuestrar niñas».

«Es un notas que anda buscando críos por la zona de Cobeja, Pantoja y Yuncos y todos esos sitios. Ahí viene la matrícula del coche», comenta un hombre en un audio que también circula al respecto, añadiendo además que el supuesto pederasta, al que se señala con una fotografía en la que no se le distingue muy bien, pero en la que sí se ve a la perfección la matrícula de su coche, «ha salido hace cuatro días de la cárcel por el mismo tema (secuestro de menores)». Por último, en esos audios que circulan entre la comunidad educativa de la provincia se señala que  la Guardia Civil tiene conocimiento de ello y «lo tiene localizado», pero que «no puede hacer nada porque todavía no ha hecho nada».

Así, en relación a este último caso, el gabinete de comunicación de la Comandancia de la Guardia Civil en Toledo ha confirmado a La Tribuna que tampoco hay ninguna denuncia al respecto sobre el hombre de la fotografía, indicando además que esa alerta se hizo ya viral antes de que se produjera el secuestro y asesinato del niño de 9 años en Lardero el pasado 29 de octubre y que, tras el caso de la Rioja, el tema ha vuelto a dispararse.

La Guardia Civil señala que «no hay ningún dispositivo especial por intento de secuestros ni vigilancia especial sobre la persona que aparece en las imágenes». Por eso, hacen un llamamiento a la calma en toda la provincia.