Juan Ignacio de Mesa

Barrio de Santo Tomé

Juan Ignacio de Mesa


Historia

19/09/2022

¿Tuvo la inflación algo que ver con la caída del Imperio Romano?
Todos asociamos la caída del Imperio Romano con la invasión de los bárbaros. Atila se encuentra en el imaginario popular como el azote de Dios. Gobernó sobre el mayor imperio europeo de su tiempo, entre el 434 hasta el 453.
Pero todavía se mantenía el Imperio Romano, el de occidente con su capital en Ravena (si no la conocen visítenla) y el de Oriente en Constantinopla. Un imperio que llegó a ser el más poderoso bajo el mandato de un emperador hispano, Trajano, que en el siglo II llegó hasta el océano Índico. Esta superficie, hacía necesario mantener un gran ejército para defender sus fronteras. Pero, como en todo colectivo, también hubo emperadores incompetentes. Caracalla, el de las Termas y otros caprichos del mismo estilo, que hubo que pagar, además subió el salario de los soldados y funcionarios. Y para pagar todo esto, subió los impuestos y, además, devaluó la moneda, pasando el denario de tener un 95% de plata, a un 50%. Esto supuso un aumento en el precio de los productos, llegando la inflación a alcanzar el 1.000%. El problema que montó fue tal, que su propia guardia le asesinó. Y siguieron otros emperadores no más lúcidos que él. Y continuó la devaluación, la subida de impuestos y la inflación, que se iba trasladando a todo el Imperio, y el descontento aumentaba entre los ciudadanos. Tras la muerte del emperador Caro, Diocleciano fue proclamado emperador por el ejercito (sin primarias ni elecciones). La crisis económica no es relacionada por Diocleciano y su gobierno con las continuas devaluaciones (el denario casi no tiene plata) y la inflación, ni con el excesivo gasto público. Aumenta el ejército de 685.000 a 955.000 soldados. Duplica el número de funcionarios, pasando de 15.000 a 30.000. Diocleciano culpa de todo a los comerciantes, de los que dice, solo se preocupan de sus beneficios. Era una versión que gustaba a los ciudadanos, tenían un culpable sobre el que soltar su ira. Diocleciano toma una decisión, promulga el Edicto sobre Precios Máximos (el Real Decreto Ley de la época) que fijaba el precio máximo sobre más de 1.300 productos, además de establecer el coste de la mano de obra para producirlos. Y no se corta al establecer el castigo para el que lo incumpla, ni más ni menos que pena de muerte. Al fijar unos precios demasiado bajos, muchos comerciantes dejaron de tener algunas mercancías, el mercado negro aumentó, así como las operaciones de trueque. En algunas ciudades, desapareció el comercio.
Y como el edicto también fijaba los salarios, muchos trabajadores, incluidos los poderosos soldados, vieron cómo su poder adquisitivo era cada vez menor. Al final, la inflación, y decisiones equivocadas para luchar contra ella, supuso que el Imperio cayera en el 476.
P.D. No debemos analizar la Historia con criterios actuales. Los parecidos son mera coincidencia.