La situación de la vida en clausura no es para nada halagüeña. En parte por el cambio en las dinámicas sociales, y en parte por la disminución en el número de vocaciones, y la avanzada edad de las mismas; ya que el 37 % de la población religiosa cuenta con más de 75 años. Son numerosos los conventos y monasterios de Toledo que se encuentran en estado de abandono, o que incluso sus muros ya albergan otros usos.
A pesar de ello, aún es rica y prolífica la vida monástica en algunos casos, tal y como explica para La Tribuna Ignacio González-Varas, catedrático de Historia del Arte y Patrimonio Cultural en la Escuela de Arquitectura de Toledo.
El profesor González-Varas relata que la situación de la vida en clausura ha ido transformándose con el paso de los años. Ha ido mutando en función de múltiples factores, pero lo que parece claro es que existe una problemática clara sobre el uso de los espacios, ya que por su forma de construcción y distribución, no puede dárseles cualquier funcionalidad, sino que hay que tener ciertos factores en cuenta para reutilizarlos y sobre todo tener en cuenta que, «cuando un convento queda deshabitado, irrumpe el riesgo de expolio, por lo que hay que buscar la solución a la mayor brevedad posible», puesto que tal y como indica «es algo que no se puede permitir».
Para ello, juega también un papel importante en Toledo el Consorcio de la Ciudad, que ha realizado algunas importantes acciones para la conservación y restauración de los conventos en su Programa de Patrimonio Monumental. Esto ha permitido dar una nueva vida a estos enclaves o rehabilitar espacios en deterioro, como el robo de un tambor de columna en la portada plateresca del convento de San Clemente, hasta obras de mayor calado y envergadura, como, por ejemplo, la recuperación del arrimadero de azulejos y patio de la Mona del convento de las Comendadoras de Santiago, la restauración de la iglesia y la capilla de San Jerónimo del convento de la Concepción Francisca, la restauración de la sala capitular del monasterio de San Clemente, la recuperación del claustro de las Procesiones y el jardín del convento de San Clemente, la restauración de las bóvedas del convento de Santo Domingo el Real, la intervención en las celdas y el patio de la Enfermería del convento de Santa Isabel, la rehabilitación de las cubiertas del patio grande, coro viejo y fachadas del convento de Santa Úrsula, la restauración de las cubiertas de la iglesia de los Carmelitas Descalzos o la recuperación de los espacios libres privados del recientemente extinguido convento de Santa Clara, tal y como recuerda el profesor en alguna de sus publicaciones; pero siempre teniendo en cuenta que se trata de edificaciones que pertenecen a las órdenes que los habitaron y que cuentan con jurisdicción propia, lo que les dota de plenos poderes para dirigir los derroteros, ya que «no han de atenerse ni a las voluntades del Papa de Roma».
En los estudios llevados a cabo por el profesor González-Varas se han llegado a contabilizar hasta 53 conventos en Toledo, de los que han permanecido los edificios de 34, pero de ellos tan solo 12 aún albergan comunidades religiosas, pues cuatro han sido recientemente cerrados durante el último lustro y aún no se les ha dotado de nuevo uso.
En el plano también se detallan los quince conventos desamortizados que han sido reutilizados para distintas funciones en diferentes fechas, a los que habría que sumar los tres conventos situados fuera del casco histórico, uno de ellos, el cisterciense de Nuestra Señora de Monte Sión, aún activo.
También el profesor menciona los 19 conventos extinguidos que fueron posteriormente demolidos y de los que «nos quedan noticias documentales».
Curso de Verano. A colación de esta problemática y con la pretensión de crear un «foro de debate», desde la UCLM, se ha organizado un curso de verano que bajo el nombre 'Conventos y monasterios en la ciudad histórica: gestión e intervención en sistemas patrimoniales complejos', abordará en la Escuela de Arquitectura de Toledo, Aula de cine, los días 13 y 14 de junio, para debatir sobre su presente y futuro y se proporcionan herramientas para la intervención en estos sistemas patrimoniales complejos, con la reunión de expertos de relevancia nacional que han intervenido en estos espacios singulares en nuestra ciudad pero también en otras como Alcalá de Henares o Sevilla.
El gerente del Consorcio, Jesús Corroto, participará con una ponencia sobre el patrimonio conventual y las intervenciones realizadas por la institución en estos espacios singulares de gran valor patrimonial en sus más de 20 años de actividad, y el propio 13 de junio tendrá lugar una mesa redonda a las 18:00 horas, que está abierta «a cualquier toledano interesado en el tema, aunque no esté inscrito en el curso», pero que tal y como el propio González-Varas explica pretende integrar a cualquiera que tenga inquietudes sobre esta materia.