El próximo 14 de febrero es el Día de los Enamorados, pero también el del lanzamiento en DVD, Blu ray y 4K Ultra HD de la primera temporada de La casa del dragón, que se puede ver en HBO. La serie nos devuelve al fantástico Westeros. Tenemos tramas palaciegas, acción, a los Targaryen en su apogeo y, sobre todo, ¡dragones! Basada en una novela de George R.R. Martin, Fuego y sangre, que viene a ser una cronología de los eventos históricos relacionados con la mítica casa. 

El planteamiento ha estado mucho menos orientado a la fantasía. Se ha centrado en la sucesión en el Trono de hierro y los conflictos entre las diversas casas de Poniente. Es decir, no tenemos caminantes blancos, que fueron uno de los elementos principales de Juego de tronos. A este motor narrativo se une una más que notable construcción de personajes, que en esta primera temporada es marca de la casa en el universo del novelista estadounidense. Todos los personajes tienen una gran cantidad de matices que acrecientan el interés por ellos.   

La serie arranca con Rhaenyra Targaryen, la hija del rey Viserys, quien la elige para sucederle. Este acto que rompe con todos los convencionalismos de la sociedad de Westeros provocará un cisma dentro de la familia que gobierna y, con ello, un inevitable conflicto, en el que seremos testigos a la caída de los Targaryen. A partir de este punto de partida, la ficción va avanzando de forma firme y coherente, ofreciendo un producto realmente solvente y con un final de temporada realmente evocador, aunque tengamos que esperar dos años para el inicio de la segunda.

Uno de los aciertos ha sido el casting, encabezado por Milly Alcock como la joven Rhaenyra, Paddy Considine como el rey Viserys, y a Matt Smith como el príncipe Daemon, estos dos últimos haciendo un más que solvente trabajo actoral. Smith, que es muy conocido por otras series como The crown o el Dr. Who, literalmente se sale y su personaje raya la perfección. Al lograr construir un personaje que el publico ama y odia a partes iguales, llena la pantalla en cada aparición. Aunque también hemos de subrayar que no tenemos personajes con el carisma de Meñique o Tyrion Lannister por citar solo algunos ejemplos de lo que la serie original ofrecía.  

Momentos truculentos

Lo que está claro es que La casa del dragón es digna sucesora de Juego de tronos y, para ello, usa con maestría los elementos que la convierten en un producto dirigido para el público más adulto al ofrecernos dosis de momentos un tanto sangrientos y quizás un poco truculentos. Estos son usados con cierta habilidad por los guionistas, que dotan a la serie de una tensión narrativa creciente en cada episodio. 

En el debe podríamos decir que el argumento de quién se sentará en el Trono de hierro es casi idéntico al de la saga original, aunque el punto de partida sea algo distinto.

En definitiva, podemos afirmar que estamos ante una producción que nos ofrece los entresijos de la familia Targaryen, en la que podemos ver el origen de lo que ya vimos en su famosa secuela. Ycon unos efectos y una puesta en escena notables, aunque muy alejados de su competidora de Amazon Prime (Los anillos de poder). Eso es algo que no podemos dejar escapar. 

Con todo ello, podemos afirmar que La casa del dragón tiene recorrido y va camino de convertirse en una de las grandes series de los próximos años.