Profesionales taurinos increpan a Díaz y golpean su coche

M.G
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Un grupo de unas veinte personas se concentra en las inmediaciones del Ayuntamiento para solicitar la dimisión de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, por la falta de ayudas por cese de actividad que han recibido el resto de sectores

Una veintena de manifestantes, profesionales del sector taurino, la liaron ayer a las puertas del Ayuntamiento con motivo de la presencia de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz y la falta de ayudas  la falta de ayudas por cese de actividad que han recibido el resto de sectores. Los espontáneos esperaron a su llegada y asaltaron un vehículo oficial cuarto de hora antes de que comenzara el acto de presentación de Toledo como Capital Europea de la Economía Social. La protesta continuó durante una hora bajo la atenta mirada de varios agentes de la Policía Local para evitar altercados, pero finalmente lograron su objetivo, increpar a Díaz cuando su coche salía del garaje del Ayuntamiento.

Poco antes de que acabara el acto, un pequeño grupo del sector taurino se ‘esfumó’ y se apostó en las cercanías para sorprender al vehículo oficial. Las dificultades que ofrece este garaje municipal para una salida rápida provocaron que a los tres o cuatro manifestantes que gritaban junto al vehículo se sumara el resto. El asalto dejó momentos de tensión con unos manifestantes muy exaltados que terminaron golpeando los cristales y entorpeciendo el paso con una pancarta. Además, uno de ellos se tiró al suelo delante del coche para impedir su salida, con lo que los policías nacionales y locales tuvieron que actuar, levantar al manifestante e impedir que el altercado fuera a más, pero en ningún momento se produjeron cargas policiales pese a la exaltación de los participantes.

Las redes sociales avisaban de la posible protesta del sector taurino a las puertas del Ayuntamiento aprovechando la presencia de la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, en el acto del Ayuntamiento pero parecía improbable porque la plaza estaba vacía un cuarto de hora antes del comienzo del acto. Sin embargo, a las doce menos diez de la mañana se acercó un coche oficial oscuro, atravesó la plaza y se quedó encajado en el acceso del Ayuntamiento y un par de segundos después apareció, al menos, una veintena de personas gritando y pidiendo la dimisión de la ministra.

Aficionados taurinos increpan a Díaz y golpean su cocheAficionados taurinos increpan a Díaz y golpean su coche«No somos delincuentes, somos toreros», no pararon de gritar durante más de media hora. Los profesionales del sector -de La Unión Nacional de Picadores y Banderilleros de España (UNPBE)-,  intentaron rodear el coche en el que pensaron que llegaría la ministra de Trabajo e insistieron en la discriminación que están sufriendo por la falta de ayudas, y en la necesidad de que el Gobierno mire por un sector «que tiene que dar de comer también a sus familias». Las manifestaciones   se han celebrado durante tres días en Madrid a las puertas del Ministerio de Trabajo, pero todo indica que se seguirán produciendo aprovechando la agenda política de Díaz estos días.

Agentes de la Policía Local  y Nacional contuvieron a los manifestantes ante la tensión que se desató y llamaron a la calma a alguno. Cinco minutos después, el vehículo abandonó la zona y desapareció sin más, aunque los participantes  continuaron con la protesta durante todo el acto e incluso se organizaron en pequeños grupos para rodear el Ayuntamiento y esperar la salida de la ministra de Trabajo.

La protesta no fue muy numerosa, pero estos afectados del sector la prepararon a conciencia para intentar acercarse a Díaz cuando llegase al Ayuntamiento. Sin embargo,  no fue posible porque la ministra se adelantó y pasadas las once y media de la mañana apareció andando por la plaza, por las inmediaciones de la fuente de Cristina Iglesias, y su entrada fue tranquila y sin ningún incidente, ya que la concentración se armó cuarto de hora más tarde, tras el desayuno de muchos de ellos.

Pese a todo, los participantes lograron su objetivo, llamar la atención durante unos minutos, aunque tras la emboscada en la puerta del garaje municipal, el vehículo de la ministra se perdió por las calles de Toledo sin más.