Nada nuevo tras el descenso (3-1)

J. M. Loeches
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El CD Toledo se ve superado por un CD Eldense que cerró el partido en la primera parte, con una imagen demasiado descuidada de los verdes

Nada nuevo tras el descenso (3-1) - Foto: David Pérez

Otra derrota más. Ni despojado de la presión. Ni con soltura. A este CD Toledo no le da. Ya no importa, pero a su gente sí le preocupa que su equipo, ya descendido, diera la sensación de desidia en la primera parte. Con todo y eso, se metieron los verdes en el partido con un rebote que esta vez sí le favoreció, pero el CD Eldense sentenció instantes después. Esta temporada ya está terminada. Las dos jornadas que quedan serán una prótesis del suplicio.

No tardó ni tres minutos el equipo alicantino en crear el primer agujero en la defensa toledano, con una internada por la izquierda a la que se tuvo que anticipar Adrián porque estaba Musa ya esperando para un remate. El balón era para el equipo que más se jugaba, el CD Eldense, aunque el CD Eldense. Los de Javi Sánchez tuvieron momentos de posesión, otra cosa es que supieran qué hacer con la pelota en ataque. Una de las asignaturas que han llevado a los verdes a repetir curso.

Porque la presión sí que la hicieron perfectamente cuando el rival intentó salir desde atrás. De todas formas, las aproximaciones, cuando se dieron, llegaron por el lado local. Como una internada por el centro que le quedó a Musa, aunque su disparo, con la izquierda, salió muy desviado por encima de la portería de Roberto. Pero en el siguiente fallo defensivo, en el minuto 19, Pablo metió para adentro un centro colgado desde la derecha por Andrada. Nadie le pudo frenar.

Tampoco pudo Andriu llegar a la altura del atacante del Eldense en un balón en profundidad que le dejó solo en carrera frente al portero verde. Pablo no falló y marcó un 2-0 que restó más todavía cualquier interés en este encuentro. El CD Eldense no se conformó con la ventaja. Quería más goles. Por eso no paró de entrar por un lado y por otro frente a un rival, el capitalino, que dejó patente su falta de tensión. Y sin herramientas para generar peligro, un equipo que ha descendido sin actitud se queda en absolutamente nada.

Los toledano se quitaron el agobio en unos minutos, gracias a una posesión absurda en su propio campo y sin proyectarse en ataque. Pero en el minuto 37, Kike Pina se fue hacia adelante y generó algo de inquietud en la zaga del CD Eldense. Lo máximo que sacó fue una falta que, con mucha fortuna, Alberto Bernardo introdujo en las mallas después de tocar en la barrera y despistar a Guille Vallejo.

La celebración duró poquísimo, algo más de un minuto. Porque Andrada entró de nuevo por el costado derecho como un misil y no se pensó poner el balón al área. Allí estaba otro cañonero, Ángel Sánchez, que empaló el balón e hizo inútil la estirada del guardameta del CD Toledo. El Eldense estaba llegando con una facilidad sorprendente. Qué falta de concentración. El equipo estaba completamente desenchufado.

El arranque de la segunda parte dejó a unos pupilos de Javi Sánchez ya con una actitud de, por lo menos, competir el partido. El cambio de Herrera por Mario Gómez trajo mayor profundidad por la banda derecha. Suyos fueron los centros que nadie remató. Pero con llegar hay gente que se conforma. Cédric dispuso de la suya. Como siempre, en carrera. Como siempre, sin hacerse valer frente al portero. Tampoco se perdieron las costumbres con una falta escorada que nadie remató con claridad. Otra asignatura suspensa.

Lo cierto es que el control lo tenía el CD Toledo. El cambio de actitud era patente. Lo de atacar bien… ya es otra historia. La sensación es que las ocasiones alicantinas eran más concretas. Y muestra de ello, el pase interior de Luque para Musa que el delantero no supo aprovechar por andar demasiado lento. No valía la jugada. Estaba en fuera de juego. Definitivamente, la mejoría del inicio se fue como la espuma y hubo que ponerse el traje de defender. No llegó el cuarto, de milagro.

Javi Sánchez quitó a un Cédric desacertado para meter a Rubén Moreno. No solucionó nada, al menos momentáneamente. Los de verde recuperaron la manija y se dedicaron a mover el balón para que pasaran los minutos. Mejor no perderla. A falta de un cuarto de hora, Alberto probó a Guille Vallejo desde el balcón del área. Estaba muy lejos. Javi Sánchez veía bien a los suyos, pero dio entrada a De Felipe y Álex Martín, para mandar a Andriu a su tarea de peinar balones.

El escenario estaba difícil para modificarlo. Se estiró algo el CD Toledo, y eso lo que provocó es que el Eldense gozase de contragolpes claros. La polémica llegó con una caída de Rubén Moreno dentro del área. El colegiado y su asistente se hicieron los suecos. Ya da igual. Timón debutó a falta de dos minutos para cumplirse el tiempo reglamentario, después de ascender a División de Honor el sábado con el Juvenil. Los cinco minutos de descuento sobraron completamente.