Otra vez el Kidokan ha conseguido situarse en el podio, en esta ocasión gracias a Alejandro Ortiz, que tuvo una participación excepcional en el Campeonato Iberoamericano que se ha celebrado durante este fin de semana en la ciudad mexicana de Los Cabos. El toledano cosechó el oro en su categoría (Kumite -60 kilos) en su primera participación, además, con la selección española absoluta, que cosechó en tierras americanas nueve medallas: seis de oro y tres de bronce.

De esta manera, además de Alejandro, en Kumite también consiguieron medallas de oro Nadia Gómez, Adriana Gil y Rafael Ibáñez, mientras que  Alberto Delestal y Lander Orbea acabaron con un bronce colgado del cuello. En la modalidad de Kata, el oro correspondió a Raquel Roy y Sergio Galán; el bronce fue para Lidia Rodríguez.

Todos los españoles ya habían participado con regularidad en categorías inferiores y, en esta ocasión, han dejado una grata impresión entre la élite. Detrás de este trabajo han estado el madrileño Francisco Salazar, en kata, y el cordobés César Martínez Blanes, en kumite, ambos técnicos de la Real Federación Española de Kárate (RFEK).

En el caso de Alejandro Ortiz, ha sido la primera llamada del combinado nacional absoluto. Y es que, el karateca del Kidokan Castilla-La Mancha ya sabe lo que es defender la elástica nacional en las categorías inferiores. No en vano, es vigente subcampeón de Europa Sub 21 y también de los Juegos del Mediterráneo. Un currículo al que sumar esta medalla de oro en un torneo en el que toman parte los miembros de la Comunidad Iberoamericana de Naciones (CIN).