Los regantes del Levante han anunciado este viernes una concentración el martes 17 de mayo en Alicante para protestar por la planificación hidrológica del río Tajo recientemente aprobada porque supondrá un nuevo recorte al trasvase, a la que seguirán otras protestas en diversas localidades del sureste español antes de que el Consejo de Ministros dé el visto bueno a ese plan.

Así lo ha anunciado el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Lucas Jiménez, al término de la Asamblea General de regantes levantinos, que agrupa a ochenta comunidades de regantes de Alicante, Almería y Murcia.

Jiménez ha calificado de "anodina" la planificación aprobada porque sube el caudal ecológico del río Tajo solamente en Toledo, Aranjuez y Talavera y la baja en otros puntos de ese río e incluso en otros planes de cuenca españoles, por lo que ironizó si el ministerio considera que el Cambio Climático solo se cebará en esas tres ciudades y perdonará al resto del país.

Además, aseguró que se trata de una planificación "teledirigida políticamente, de la que no se va a beneficiar nadie en el país, ni los Pueblos Ribereños del Tajo, al ver mermada la película de agua en los embalses de cabecera, ni siquiera Castilla-La Mancha, porque tendrá merma económica al recibir menos dinero de los que siempre pagamos el pato; murcianos, alicantinos y almerienses", en alusión a la parte que reciben como compensación por los envíos de agua del trasvase.

De los perjuicios al Levante apuntó que el propio ministerio los reconoce apuntando al año 2027 en el texto del Plan Hidrológico del Segura, debido a la subida de los caudales ecológicos en el río Tajo.

En la lucha de los regantes contra esa planificación del Tajo, Jiménez empleó un símil futbolístico al afirmar: "No somos el Real Madrid; la remontada es muy complicada, por no decir imposible, pero por proximidad somos similares al Alcoyano y vamos a seguir peleando hasta el último minuto de partido".

Lamentó que pueda haber dirigentes de Castilla-La Mancha "que con muy mal gusto y muy poca educación hagan chanza de lo que pueda ocurrir en el Levante" a raíz de la planificación recientemente aprobada, y que celebren que "con la que está cayendo puedan ir al paro más de 8.000 personas".

Por ello, invitó al Gobierno central a que decida si continúa con esos "intereses espurios y cortoplacistas" que además no solamente en regadío, sino en abastecimiento humano, supondrán probablemente subir la tarifa del agua en el Levante, cuando ya es de por sí la mas cara de Europa.