A por la tercera

I. Dufour (EFE)
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Luis Enrique encara un nuevo cruce tras de haber superado los octavos en dos ocasiones como jugador

El asturiano salta por encima de un contrario en el duelo contra Suiza del Mundial de 1994. - Foto: Kote Rodrigo (EFE)

España espera hoy superar los octavos de Qatar 2022 contra Marruecos con Luis Enrique en el banquillo. El seleccionador ya atravesó esa barrera en dos ocasiones como jugador, una en Estados Unidos'94, cuando doblegó por 3-0 a Suiza, con un gol suyo incluido, y otra en Japón y Corea 2002; las dos con él en el campo como una de las piezas básicas de un esquema ganador.

Son las dos ocasiones en las que encaró esta ronda del torneo, que ahora aparece en su camino como entrenador del cuadro nacional, porque en su otra Copa del Mundo como futbolista, en Francia'98, el equipo no alcanzó las eliminatorias. Se quedó fuera en la primera fase, pese a la sonora victoria con la que se impuso por 6-1 a Bulgaria en la última jornada. No fue suficiente. Era la mayor goleada de la historia de la selección antes de esta edición y del 7-0 con el que el grupo del asturiano apabulló a Costa Rica.

2 de julio de 1994. En su primera experiencia en el campeonato, Luis Enrique se presentó en los octavos de final a las órdenes de Javier Clemente, tras una primera fase en la que la Roja había empatado contra Corea del Sur (2-2) y Alemania (1-1), con él como titular, y había ganado a Bolivia, por 1-3, con él como suplente. Para el inicio de los cruces en Washington, volvió al once para enfrentarse a Suiza ante 53.000 espectadores en el estadio Robert Fitgerald Kennedy.

El '21' ocupó la novedosa demarcación de delantero en la fase final de 1994, porque antes se había desempeñado más en tareas defensivas a lo largo de la primera ronda, aunque su polivalencia le permitía jugar en cualquier posición.

En un partido práctico, al contragolpe, cimentó aquel día su triunfo, con el 2-0 anotado por Luis Enrique, tras un pase de Sergi Barjuan. Antes, Fernando Hierro había conseguido el 1-0 y, de penalti, Txiki Beguiristáin cerró el encuentro con el 3-0.

Revancha

Eliminado en la fase de grupos en Francia'98, el Mundial de Japón y Corea'02, ya con José Antonio Camacho como entrenador, proponía una revancha para la selección. Ganadores de cada uno de los tres duelos de la primera fase, con participación de 'Lucho' en todos y cada uno de ellos, en octavos de final apareció Irlanda, que llevó a la Roja hasta el límite.

Luis Enrique jugó los 120 minutos del compromiso. En el once, además, formaron Íker Casillas, como guardameta; Carles Puyol, Hierro, Iván Helguera y Juanfran, en la defensa; Rubén Baraja, Juan Carlos Valerón y Javi de Pedro, además del actual entrenador del conjunto nacional, en el medio campo; y Raúl González y Fernando Morientes, en la parcela ofensiva.

En el minuto ocho, Morientes cabeceó un centro de Puyol para reafirmar la condición de favorito que le correspondía en ese choque a España. Ni mucho menos fue así. Ni tan visible ni tan indiscutible. Al borde del final, Anders Frisk señaló penalti de Hierro sobre Quinn. Robbie Keane lo transformó. El partido llegó a los penaltis.

Keane marcó el primero; Hierro contestó con el segundo; Holland falló el siguiente; Baraja dio ventaja con el cuarto; Casillas paró el siguiente tiro de David Connolly... Pero Juanfran envió fuera el suyo, pero el 'santo' volvió a aparecer. Falló Valerón, marcó Steve Finnan y Mendieta sentenció.

La Roja accedió a cuartos de final, igual que pretende ahora Luis Enrique, esta vez como seleccionador.