Desde la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha, pusimos en marcha la iniciativa 'La Empresa en la Escuela' para poder llevar a los colegios distintos ejemplos de iniciativas empresariales que están en el territorio donde dichos centros escolares se encuentran.
Todos tenemos la obligación de crear interrogantes entre los alumnos y profesores, para procurar que se puedan adecuar a la situación cambiante en la que el mundo se encuentra. Estamos ante la cuarta revolución industrial. Si miramos hacia atrás y vemos en que empleos estaban ocupados nuestros abuelos, vemos que nada tiene que ver con la situación actual. Se calcula que el 47% de los empleos actuales desaparecerán. Y surgirán otros nuevos, pero ¿qué nuevos empleos surgirán? Hace 70 años, la mayor empresa del mundo era General Motors. Hoy son Google, Microsoft, Apple, etc. La globalización ha desubicado los principales centros de producción. Más del 50% de los puestos de trabajo se encuentran en países que no han firmado los distintos acuerdos de respeto a los derechos humanos.  
Stephen Hawking decía que la tendencia actual marca la desaparición de las clases medias. La automatización demuestra, día a día, cómo se pueden sustituir muchos puestos de trabajo por un robot. Vamos camino de un mundo nuevo que nos obliga a preguntarnos si nos estamos preparando para encajar en estas nuevas situaciones. Y la pregunta es, ¿estamos preparando a los estudiantes para el mundo que viene, o para el mundo que se está yendo?
Los estudios son fundamentales, tenemos que prepararnos, todos, para un mundo en el que la tecnología nos puede mejorar la vida o complicárnosla. Los ordenadores forman ya parte de nuestra vida, aunque sea en el simple uso de un teléfono móvil. Pero hay algo que las máquinas no nos pueden dar todavía, que es la inteligencia emocional. Tenemos que mandar el mensaje a las nuevas generaciones, que de ellos depende cambiar el mundo. En mi generación, en bachiller, se optaba entre la rama de ciencias o la de letras, hoy ambas deben ir unidas para tener la mejor preparación posible. Los jóvenes deben saber que cada uno de ellos es su propio 'empresario' dependerá de él y del nivel de preparación que haya conseguido, el poder ser un generador de su propio puesto de trabajo.