Nace una asociación para ayudar a ucranianos en Talavera

Lola Morán Fdez.
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Seis mujeres de diferentes nacionalidades han formado esta asociación que tiene su sede en un local cedido en la calle del Sol y facilita el primer apoyo a refugiados

Cinco de las seis integrantes de la Asociación ‘Talavera con Ucrania’. - Foto: Reviejo

Talavera cuenta con una asociación creada de manera expresa para ayudar a las familias ucranianas recién llegadas a la ciudad huyendo de la invasión rusa en su país. Seis mujeres, de diferentes nacionalidades, son el germen de la asociación 'Talavera con Ucrania', entidad que ha nacido de las reuniones que surgieron para impulsar la colaboración ciudadana desde Talavera hacia el pueblo ucraniano. Si bien en un primer momento se organizó una recogida de alimentos, prendas y productos de higiene, entre otros, para enviar a la frontera con Ucrania para ayudar a los refugiados, después se comprobó que lo que se precisaba ya era actuar sobre el terreno.

«Nos dimos cuenta que hacía falta una continuación, pero ya de diferente manera», expusieron sus integrantes a La Tribuna, explicando que, con la llegada de familias ucranianas a la ciudad, hacía falta «un apoyo de alimentación, un apoyo de ropa, un apoyo de vivienda, un apoyo psicológico, para acompañarles a solicitar los papeles, ayudas, escolarización, empadronamiento....».

A raíz de todo ello nació esta asociación que busca dotar a los ucranianos recién llegados a la ciudad de todo aquello que precisen nada más aterrizar en Talavera, no solo a nivel material sino también emocional, de la mano de sus integrantes, Victoria Ramos Saldaña, Iryna Sotnykova, Victoria Siroshtan Siroshtan, Valeria Kovalenko Tkachuk, Olena Rudenko y Aurica Vicol, que cuentan con la desinteresada colaboración de Iratxe Pérez, Victoria Alemán y Eva Silgado.

Todas ellas son el alma de 'Talavera con Ucrania', que cuenta además con la ayuda de Marcelo, propietario del local que han convertido en sede, situado en calle del Sol, 18, y que les ha cedido con la intermediación de la Asociación Aurelio de León.

Allí almacen material sobrante de la carga que se envió a Ucrania, junto con las donaciones que les van haciendo llegar particulares y otros colectivos, entre ellos la reciente aportación del colegio Juan Ramón Jiménez.

Alimentos no perecederos, productos de higiene, prendas de vestir, calzado, ropa de cama e incluso juguetes son parte de la dotación que tienen recopilada en estos momentos en el local, que luce en su fachada una bandera de Ucrania. Allí se puede llevar por parte de cualquier persona dispuesta a colaborar, avisando previamente a los teléfonos 617 40 41 78 y 687 854 890 para confirmar horarios.

todo lo que haga falta. Desde esta sede, se ocupan de proporcionarles «todo lo que haga falta» a los refugiados ucranianos que recalan en la ciudad y que llegan hasta ellos tras conocerlos, sobre todo, por el «boca a boca». A través de las redes sociales informan de su actividad, de la que también tienen conocimiento desde el área de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Talavera, según expusieron a este diario.

No en vano, estas mujeres ya venían colaborando con este área como traductoras, labor a la que ahora se suma el reparto de estas ayudas. Son los propios ucranianos los que se acercan hasta la nave para recibir esta ayuda, que se les otorga en función del número de personas a las que se dirige y las necesidades de sus integrantes.

En cualquier caso, desde la asociación explicaron que se trata de «una ayuda puntual, un empuje inicial porque aquí no hay para dar todas las semanas una bolsa», puesto que siguen llegando familias a la ciudad. «En principio tenemos para darles el primer empujón pero luego ya esto tiene que ir saliendo del estado o de los servicios sociales, algo tiene que haber», trasladaron. Sin embargo, de momento, al menos a las familias que ellas tienen identificadas, no les ha llegado esa ayuda por parte de las administraciones, y por ello han tenido que prestarles desde la propia asociación en más de una ocasión.

 Se da el caso además de refugiados que llegan a la ciudad porque cuentan en ella con familiares o amigos, pero «no podemos recibir a todos en nuestras casas». De ahí que busquen pisos o casas disponibles para la acogida de familias ucranianas, y, mientras se cuenta con este recurso, que las familias de acogida puedan disponer de ayudas para compensar este gasto añadido. «No pueden dar más de sí ya», señalaron al respecto.

No solo es material la ayuda que se puede proporcionar, sino que desde esta asociación animan a escuelas, clubes, entidades y demás a facilitar a los niños ucranianos que han llegado a la ciudad en estas difíciles circunstancias a participar en actividades extraescolares de ámbitos como el deporte para mejorar su estado de ánimo y favorecer su integración. Natación, artes marciales, dibujo, clases de castellano son algunas de las sugerencias que plantean estas mujeres, quienes destacan la importancia de que puedan socializar. En esta línea, ya han contado con colaboraciones como la del circo de la familia Segura y con una actvidad musical de la mano de Iratxe Pérez.

En este sentido, explicaron que hay niños que siguen sus clases de manera online con sus profesores de Ucrania y no tienen contacto con escolares españoles, con lo cual están completamente aislados y no tienen conocimientos de castellano, algo que empiezan a manejar los que sí están ya escolarizados en centros educativos de la ciudad o de los municipios de la comarca.

Asimismo, destacaron la importancia de que los niños y adolescentes cuenten con un apoyo psicológico profesional ante los hechos vividos en su país de origen y lo que han dejado atrás a causa de la invasión rusa. «Son niños que han pasado muchísimo, que han sido pilares fundamentales de sus madres en los viajes cuando estaban huyendo de la guerra, de las explosiones, estos niños necesitan un apoyo psicológico, porque ahora mismo están recluidos en sus cuartos sin salir», manifestaron, señalando en cualquier caso la complejidad de trabajar con ellos por el idioma. «Necesitaríamos hacer un llamamiento a psicólogos ucranino-hispano hablantes», dijeron.

De igual manera, hacen un llamamiento a proveedores que puedan colaborar con productos frescos como fruta, verdura, carne o pescado para que los ucranianos puedan contar de manera gratuita con estos productos, algo que en desde este almacén no pueden ofrecer.