La lengua de fuego avanzaba imparable unos tres kilómetros a la hora.  / DOMINGUÍN
La lengua de fuego avanzaba imparable unos tres kilómetros a la hora.  / DOMINGUÍN
La lengua de fuego avanzaba imparable unos tres kilómetros a la hora.

Dominguín

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

Yolanda Redondo

David Pérez