Sinopsis oficial
Grace Davis es una superestrella musical, una gran leyenda del mundo del espectáculo afincada en la fabulosa ciudad de Los Ángeles, con un talento casi tan grande como su ego. Grace siempre va acompañada por su eficiente y estresada asistente personal, Maggie quien compagina secretamente su sueño de ser productora musical con los innumerables recados de su jefa.
La crítica -
Por Juana Samanes
La actriz Dakota Johnson se distancia del erótico personaje de Anastasia Steele, de la saga Cincuenta sombras de Grey, para encarnar a Maggie, una asistente personal de una superestrella de la música asentada en la ciudad de Los Ángeles. Pero como una cosa es el trabajo y otra los sueños, Maggie aspira a dejar de ser “la chica de los recados” de su jefa y convertirse en productora musical.
Aunque no lo parezca, Personal Assistant tiene muchas semejanzas con la divertida comedia El diablo se viste de Prada, donde una simpática Anne Hathaway se enfrentaba también a una maniática jefa, en ese caso del sector del periodismo de moda. Pero, lógicamente, cambia el mundo en el que se desarrollan.
Se trata de una agradable propuesta que indaga sobre la fama, en cómo asumirla, pero también en la dificultad de mantenerse en primera línea cuando se llega a una determinada edad. Pero, fundamentalmente, es la historia de una joven luchadora que persigue conseguir el sueño de su vida a pesar de las adversidades que comporta. O lo que es lo mismo; sin poseer una temática novedosa y con algún altibajo en su desarrollo, el argumento está bien narrado, siendo uno de los apartados más interesantes su bien elegido reparto. Además de Dakota Johnson encontramos a la hija de la famosa cantante Diana Ross, Tracee Ellis Ross, que interpreta por primera vez un tema musical en la pantalla, aunque nunca había pasado antes por un estudio de grabación, y lo hace transmitiendo mucha emoción También defiende con mucho talento algunas canciones Kelvin Harrison Jr., en el papel de David, asumiendo el personaje más romántico de la trama. Porque, evidentemente, la música es un apartado importantísimo de este film, sin ella no funcionaría, de ahí que se haya contado con el famoso productor musical Rodney Jerkins, también conocido como “Darkchild”, para que se encargara de supervisar toda la banda sonora y que se fichase a Corinne Bailey Rae, ganadora de un Grammy, para componer los temas originales de la película junto con la joven Sarah Aarons, de 25 años, que contribuyó con otro tres.