La crítica -
Por Juana Samanes
Cosmética del enemigo traslada a imágenes una novela de Fabienne Claire Nothomb, conocida en el mundo de la literatura con el pseudónimo de Amélie Nothomb. Un relato oscuro, que indaga en la naturaleza humana, y que a pocos dejará indiferente
Un famoso arquitecto, Jérôme Angust, conoce circunstancialmente a una extraña joven, Textor Texel, a la que lleva al aeropuerto pero, cuando pierde su vuelo, comenzará entre ambos una intrigante conversación, donde la inoportuna Textor le desvelará aspectos terroríficos de su existencia.
Claramente apoyada en “un mano a mano” entre dos personajes, esa especial idiosincrasia del texto condujo a que, en nuestro país, Cosmética del enemigo fuera adaptada a los escenarios teatrales hace años, en el 2009. Cuando Kike Maillo ha decidido llevarla al cine, ha contado como coguionista con Cristina Clemente. Ambos se han tomado ciertas libertades sobre el texto literario, a la búsqueda de darle una imagen más cinematográfica, la más significativa el cambio de sexo de Textor Texel, que aquí es una mujer y que, digámoslo claro, todavía hace más perturbadora la trama, donde la violencia y la crudeza van por el mismo camino.
Como es usual en este tipo de relatos, que los anglosajones bautizaron como “Two hanter”, el comienzo de la relación entre ambos personajes es misterioso, algo que se agudiza por el extraño nombre de Textor Texel, que se traduciría como algo así como tejedor de historias, y, a medida que avanza la trama, va introduciéndose en vericuetos más oscuros, más peligrosos, que conocemos mediante recurrentes flash-back.
Al comienzo de la película leemos una conocida cita del escritor galo Antoine de Saint Exupéry : “La perfección no se alcanza cuando no hay nada más que añadir, sino cuando no hay nada más que quitar” pero, lo que realmente da más pistas sobre esta historia es el propio título: cosmética nos habla de algo que se oculta…como los propios instintos.
Sin poder desvelar muchos más datos argumentales, para no desvelar el “spoiler” del film, lo que puede afirmarse sin tapujos es Kike Maillo siempre ofrece unas películas de factura visual cuidadísima, en esta ocasión algunas secuencias transcurren en el cementerio de Montmatre o en el aeropuerto Charles De Gaulle. Pero también destaca su forma de filmar, aquí realiza planos secuencia impecables. Igualmente se han esmerado en la elección adecuada de un casting internacional donde Tomasz Kot y Athena Strates llevan el peso pero que cuenta también con una presencia sobresaliente de la española Marta Nieto, espectacular y multipremiada por su actuación en Madre.
Al fondo de este relato, no exento de giros inesperados, gravita el sentimiento de remordimiento y culpa, que da mucho de si en esta historia.
La película, que no ha pasado por las salas de cine, se estrena en la plataforma Filmin.