El proyecto de Biciaula se presentó ayer en el Centro Cultural Rafael Morales con la presencia de una representación de a quienes va dirigido: escolares de Tercero y Cuarto de Primaria. El acto contó con el padrino de esta iniciativa, el ciclista talaverano de Caja Rural, David Arroyo, su coordinador, Jaime Garzón, el alcalde, Jaime Ramos, y el concejal de Deportes, Javier Porras, junto a varios de los patrocinadores.

En declaraciones previas a los medios de comunicación, Garzón explicó que Biciaula vuelve después de un paréntesis de un año y que quiere llegar a unos 1.200 escolares. Las clases se impartirán en los colegios y consistirán en «una hora de teórica y otra de práctica»;y quiso resaltar «el esfuerzo de desplazar a las aulas 15 bicicletas para que los niños de nuestra ciudad puedan disfrutar de esta actividad». Los alumnos adquirirán nociones básicas sobre la bicicleta y sus modalidades, así como la manera de practicar este deporte de manera segura. Ybrindó el dato de que «un euro que se destina al Deporte supone 50 de ahorro en Sanidad».

Por su parte, David Arroyo se mostró muy ilusionado por retomar el Biciaula con la que aspiran a introducir a los niños «en la práctica del deporte, en este caso la bicicleta, enseñarles como manejarla y como ir preparados para circular». Después en el acto, se mostró encantado de estar «ante un cartel de lujo, que sois vosotros, los niños»; junto a esto, mostró su agradecimiento a los patrocinadores.

El deportista talaverano se halla en plena temporada deportiva en la que se encamina «al primer pico de forma y la verdad es que va todo por buen camino». Del 23 al 29 de marzo estará en la Vuelta a Cataluña que «es nuestro primer gran objetivo de la temporada y esperemos llegar en un buen nivel de forma».

El alcalde, por su parte, ante los medios incidió en que el objetivo de Biciaula es «hacer ver a los chavales la bicicleta como un medio de transporte alternativo, es decir, no solo en el deporte y en la competición, sino en el uso diario».

Resaltó que Talavera es propicia para circular en bicicleta y bromeó al señalar que «es una ciudad con una sola cuesta y que tiene nombre (Cuesta de la Filipota)». Y con un carril bici del que aseguró que «tal vez haya que mejorar y que interconexionar mejor». De todos modos, aunque cada vez son más los talaveranos que utilizan la bicicleta como medio de transporte alternativo, reconoció que todavía no es una práctica muy extendida. Y para eso están iniciativa como Biciaula u otras que se puedan poner en marcha desde el Ayuntamiento.

Y Javier Porras quiso poner de relieve que tres concejalías intervienen en este proyecto: Deportes, Medio Ambiente y Educación.