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Las estadísticas del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) ponen de manifiesto que las pernoctaciones han bajado en Toledo un once por ciento en el mes de julio respecto a junio, y un siete por ciento respecto al mismo mes de del año Greco, 2014. El presidente de la Asociación de Hostelería y Turismo de Toledo, Luis González, insiste en que «Toledo no se vende solo, hay que ir a por ello». Su idea es que la ciudad tome las riendas, no le impongan el tipo de turismo que debe tener desde fuera. Porque, al fin y al cabo, se van a beneficiar todos los sectores de la misma.
Para González, no existen soluciones inmediatas. Habrá que hacer un diagnóstico de lo que está pasando, para buscar una terapia. «Y tenemos que unirnos todos, tirios y troyanos, para ver si queremos una ciudad de día de gente que venga en AVE o donde pernocten», advierte, convencido de la situación inigualable que tiene con todas las comunicaciones que tiene, «y estamos todavía mirándonos, a ver si son galgos o podencos».
Dentro de ese diagnóstico, el calor es un factor a tener en cuenta en la ciudad, a pesar del aumento del turismo interior, y además, se ha acabado el año Greco. ¿Que hay menos turismo en julio que en junio? «Obviamente, un español no va a venir a Toledo en julio, porque conoce bien la canícula y la meteorología del país, y busca otro destino», explica el presidente de los hosteleros. En consecuencia, se deduce de los números que se está perdiendo el turismo exterior, que viene vía Madrid. Pero también hay que tener un criterio uniforme. No se puede comparar las cifras de este ejercicio únicamente con 2014, año Greco, pero hay que tenerlo en cuenta como ejemplo para buscar alternativas.
Le preocupa más a González que el descenso de visitantes la pérdida de turistas extranjeros y el hecho de que baja la ratio de noches que pasa cada turista en la ciudad. Este último dato puede venir motivado porque Toledo depende de Madrid en el turismo, y la capital ofrece visitantes de día, no pernoctaciones.
Por esa razón, González apuesta por una mayor actividad en la provincia, «que en la provincia ocurran cosas», y que Toledo se abra a la provincia. Su apuesta sigue siendo ese Plan de Acción Turística (PAT) presentado por los hosteleros este año y la capitalidad gastronómica, «porque si no, vamos a quedarnos en una ciudad de seis horas».
González explica que para recuperar turistas, no puede hacer cada sector de la ciudad la guerra por su cuenta, sino que tienen que unirse toda la sociedad «en una solución polifacética». El Ayuntamiento, a través de Rosa Ana Rodríguez y Milagros Tolón, tiene que dar el primer paso. Pero luego tiene que implicarse desde los comercios, los taxistas, la empresa del ‘tuctuc’ si sale adelante, la tirolina, Zara, los bancos, Fedeto, Cámara de Comercio, Junta y por supuesto que el sector del Turismo, «todo el mundo que mueve el dinero».