Los mayores del Polígono piden al Ayuntamiento que les dote de otro animador social en el hogar del jubilado, que les permita tener actividades durante todos los días de la semana. En estos momentos, los miércoles, jueves y viernes por la tarde el centro está prácticamente desierto por la falta de estos especialistas. En agosto se ha tenido que cerrar, mientras que otros centros de la ciudad sí han estado abiertos por la mañana. Y el problema se repite durante los fines de semana. Mientras tanto, hay lista de espera para las actividades y clases masificadas. Los mayores estiman que de haber otro animador más, podrían participar en talleres otras ciento cincuenta personas más, dado que se están perdiendo doce horas de actividad a la semana. Así lo explicó en la última Junta de Distrito del barrio Francisco José Tejero, que forma parte de la Directiva del Centro.
Esa misma Directiva se había reunido el mismo día con la concejal de Servicios Sociales, Ana Saavedra para explicar el problema. El centro perdió este segundo animador a raíz de la crisis, y los mayores quieren recuperarlo para revitalizar el hogar. Su idea es por lo menos cubrir todos los días de la semana. Sin embargo, Saavedra explicó que las restricciones en la contratación que ha impuesto el PP a las administraciones públicas, impiden la contratación de nuevo personal, más allá de las fuerzas de seguridad. Por lo tanto, sintiéndolo mucho, el equipo de Gobierno estaba atado de pies y manos.
Los mayores, explicó Tejero, están convencidos que ante la falta de animador social y con la cafetería cerrada todavía, el hogar del jubilado del Polígono está infrautilizado, y no tiene el rendimiento que tiene que tener para un barrio como este. Es más, son ellos mismos los que en ocasiones se están encargando desinteresadamente de abrir y cerrar el centro. «Pero entendemos que esa no es la solución», explicó Tejero. Su intención es buscar a alguna persona, aunque sea a media jornada, para dar más vida al hogar.
Se da la circunstancia, se lamentó Tejero, que ante la falta de actividades, la propia rondalla del hogar, que hasta ahora era una de sus mejores señas de identidad, se ha independizado. Se ha marchado al centro social, donde el Ayuntamiento sí les ha dado un espacio, a pesar de que este está ya masificado.
Es más, Tejero explicó que los mayores del centro se están quejando ante su Junta Directiva de que en lugares como Santa Bárbara sí está abierto el hogar a más horas. Se trata, explicó, de un asunto distinto. La diferencia es que en barrio de la estación las instalaciones están en el centro social, que tiene un conserje que abre por la mañana y por la tarde. De esta forma, el animador se despreocupa de otros trabajos y se centra más en las actividades con los mayores.
Junta de Distrito. La propuesta fue apoyada en la Junta de Distrito por la Asociación de Vecinos El Tajo y por IU. El concejal de Participación Ciudadana, Antonio Guijarro, repitió el argumento de que el club municipal depende del Ayuntamiento, y por lo tanto, las leyes del PP impiden la contratación de nuevo personal. Si así lo hiciera, el interventor municipal pondría objeciones.
El concejal de IU Aurelio San Emeterio se mostró comprensivo con la petición de los mayores del barrio y advirtió que si hay que buscar una solución. No puede ser que el Ayuntamiento tenga actividades todos los días en unos centros de mayores y no en otros. Como poco, habría que compartir recursos. Pero más allá, quiso contestar a Guijarro y advirtió que el Ayuntamiento se salta las objeciones del interventor cuando quiere, como ha hecho con los planes de empleo municipales y al perdonar setenta millones de euros a Tagus. En consecuencia, pidió que el Ayuntamiento tenga una «objeción institucional» y que «no cumpla a pies juntillas todas las imposiciones del PP».
Consultada por este diario, Saavedra ha confirmado que el Ayuntamiento está atado de pies y manos para contratar más personal, tanto para animadores sociales, como para cualquier otro puesto. La edil socialista se muestra comprensiva con las reivindicaciones con los mayores, pero advierte que «bastante hemos hecho con mantener en pie el Ayuntamiento los centros de mayores. Recuerda que hasta 2012 los mismos subsistían gracias a un plan concertado con la Junta y podían tener dos animadores cada uno. Entonces, el Gobierno regional cesó en su financiación. Desde entonces, cada uno de los hogares municipales del jubilado tienen un único animador social. Hubo un momento en el que, dados los problemas, el Ayuntamiento se planteó qué hacer con los centros, y decidió proseguir con ellos. De ahí, apuntó la concejal, que no es puedan compartir recursos, «porque todos tienen la misma problemática».