Los colectivos ciclistas de la ciudad se reunieron durante la mañana de ayer con el concejal de Urbanismo para mostrar su preocupación por la desaparición de caminos públicos que transcurren por la capital, por los que aprovechan para pasear los fines de semana. Jesús González de la Fuente, de ‘alas8bicienToledo’, hace hincapié en la importancia de la conservación del dominio público y de los caminos que «son de todos». En este encuentro, el edil se comprometió con los usuarios a la elaboración de un inventario de caminos públicos que será elaborado por una empresa externa. Este estudio abordará la situación en toda la ciudad y no solo en el entorno de la Quinta de Mirabel, en donde estos colectivos se encontraron este verano con las obras de vallado «por donde transcurren dos caminos públicos» que creen, según el proyecto, que «se van a cerrar». Además, el concejal también les aseguró que hablará con los propietarios de la finca.  En cualquier caso, de la Fuente considera «absurdo» que «sea una empresa externa la que diga a los municipios qué caminos son nuestros».

Gran parte del encuentro se centró en analizar el trazado del Camino de la Quinta a Argés, en donde las partes coincidieron en su titularidad pública. Sin embargo, el desacuerdo llegó en torno al arroyo por el que pasa una vereda por la que estos ciclistas montan en bici. «Se han hecho agujeros para poner vallas y vemos que no se están cumpliendo las distancias».

Este colectivo confía en las palabras del concejal y en que finalmente se respeten los caminos si bien teme la instalación de puertas porque implica que «en el futuro puedan poner candados y no podamos pasar».

Además, los ciclistas recordaron al concejal que es responsabilidad del Ayuntamietno «adecuar  y limpiar los caminos públicos y evitar que desaparezcan algunos tramos».

Por su parte, Javier Nicolás aseguró que el Ayuntamiento mantiene el compromiso de elaborar este inventario de caminos, pero no será hasta dentro de unas semanas cuando se proceda a la contratación de una empresa externa que tendrá que trabajar con archivos antiguos, pero también recorriendo estos senderos ‘in situ’. Una vez que el estudio esté acabado, el Ayuntamiento se pondrá en contacto con todos estos colectivos de ciclistas y senderistas antes de que salga a información pública y sea aprobado. Nicolás, que volvió a poner de manifiesto la voluntad del Consistorio de que «los caminos públicos sean transitados por todos», aseguró que fue una reunión con «buen talante».

Además, apuntó que las obras en la Quinta de Mirabel siguen en marcha, ya que la evaluación de impacto ambiental es positiva y tienen licencia municipal. En cualquier caso, asegura que hablar de futuros candados «es ponerse en una situación que no se ha dado», pero que «sí es así tendrán que abrirla porque así lo marca la ley».

El concejal también se comprometió a reunirse con los propietarios de la Quinta de Mirabel. Y es que, las personas que frecuentan este espacio denuncian que desde el año pasado llevan sufriendo «advertencias y amenazas» por parte del personal de la propia finca. «Nos dicen que es imposible ejercer este derecho cuando en el Catastro aparecen como vías de dominio público», indica de la Fuente.