Irene Sánchez-Escribano cambia de aires y la próxima temporada 2018/19 vestirá los colores del Adidas. La atleta toledana deja atrás dos cursos en las filas del Playas de Castellón, donde ha conseguido proclamarse de nuevo campeona de España de los 3.000 obstáculos.
Como reconoce, ha sido algo «sorprendente» porque «no era una posibilidad real hasta los últimos días». Sin embargo, se produjo la opción y el cambio le ofrece «mejores condiciones».
Y es que, Sánchez-Escribano no estará obligada a participar en las competiciones de la Liga de Clubes, como sí le pasaba en su etapa en el cuadro castellonense. De esta manera, a la hora de planificar las competiciones, tiene mucha más libertad para elegir y no desgastarse en este tipo de citas. «No tengo ninguna condición y podremos escoger lo que mejor veamos», reconoce.
Por lo demás, la corredora capitalina ha arrancado los entrenamientos más tarde de lo habitual porque la próxima campaña concluirá en octubre de 2019 con el Mundial de Doha (Catar) y porque al ponerse a trabajar, se dio cuenta de que arrastraba unas molestias en el pie de las que aún no está completamente restablecida. Ella misma admite que está «floja de forma» y que, por eso, los objetivos los va a fijar más fuertemente en la pista esta campaña.
Eso no quiere decir que no vaya a participar en las pruebas de cross, de hecho, aunque no está confirmado, podría participar el próximo 11 de noviembre en Burgos en el Cross de Atapuerca. No obstante, la idea será «acumular kilómetros y no arriesgar». De hecho, esta modalidad le viene muy bien para los entrenamientos de obstáculos porque le permiten ganar fuerza. Por tanto, clasificarse para el Campeonato de Europa de Campo a Través, que se celebrará el 9 de diciembre en Tulburgo (Países Bajos), no está entre sus pretensiones principales de este curso.
objetivos reales. Con tantos meses por delante, sí que confiesa que será todo «muy raro» porque la lejanía del Campeonato del Mundo sólo ha movido una semana el resto de pruebas, así que Sánchez-Escribano deberá estar en forma durante muchos meses. De todos modos, la gran meta de la campaña será seguir «dando mordiscos» a la marca de 9:31 de los 3.000 obstáculos. «Bajar la barrera de los 9:30 sería magnífico, aunque intentaré acercarme todo lo que pueda a los 9:27 ó los 9:25», asegura la toledana, que también tiene anotada en su agenda la final del Mundial. «Ya he estado en una final europea así que estará peleando por clasificarme para la del Mundial», concluye.