Responsables de la Consejería de Educación han tomado cartas en el asunto de las quejas de los padres de alumnos del colegio público de El Quiñón, en Seseña, por la falta de espacio en el centro ante el cada vez mayor número de alumnos. Este hecho ha obligado a instalar a comienzos de este mes nuevas aulas prefabricadas en una parcela aledaña al colegio. El pasado martes, una representación de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del centro era recibida en la sede del la Consejería en Toledo por su propio titular, Marcial Marín, con el fin de atender sus inquietudes por la situación de estas chavales, junto a representantes municipales encabezados por el alcalde, Carlos Velázquez. Tras este encuentro, el regidor confirma que la convocatoria del concurso para la construcción de un nuevo colegio en el barrio se reiniciará la próxima semana.

Velázquez, tras la información facilitada en esta reunión por los responsables de Educación, cuenta con que la convocatoria de este concurso para un colegio concertado sea publicada en el Diario Oficial de la región el próximo lunes. «Esperamos que esta vez sea la definitiva», comenta el alcalde deseando que esta vez el concurso no quede desierto como ocurrió el año pasado por defectos en las ofertas presentadas por las tres licitantes interesadas.

El alcalde espera que con esta convocatoria, que si todo va según lo previsto podría quedar resuelta en marzo, el nuevo colegio concertado de El Quiñón sea una realidad. «Existe la posibilidad de que el adjudicatario empiece su actividad el curso próximo. En el peor de los casos, estaría para el curso siguiente», detalla Velázquez.

Si la nueva convocatoria repite las condiciones de la anterior, el colegio concertado de El Quiñón Estará compuesto por tres líneas integradas por nueve unidades (clases) de segundo ciclo de Educación Infantil, 18 unidades de Educación Primaria, y 12 de ESO. Si se cubren todos estos ciclos de enseñanza obligatoria, el centro superará los 1.000 alumnos, una cifra similar a centros como el colegio Infantes de Toledo capital. Su adjudicación durará 50 años, aunque el concesionario queda obligado a solicitar el concierto educativo y renovarlo, cumpliendo las condiciones exigidas por Educación cada cuatro años.

Normalidad.

Por otra parte, el alcalde señala que ya ha vuelto la normalidad al colegio público tras explicarse al AMPA la necesidad de instalar los prefabricados, que permitirán cumplir los estándares de calidad educativa en el número de alumnos por aula. El edil ha explicado que tanto el Ayuntamiento como Educación han estado en contacto con distintos colectivos de padres del centro para  detallarles esta operación, junto a la habilitación de un nuevo patio en una parcela aledaña al centro. Aquí, Velázquez comentó que la Policía Local está adoptando las medidas oportunas para que los chicos puedan cruzar una calle  para llegar a una parcela con total seguridad, y se plantea su cierre al tráfico «de forma permanente». El alcalde también señaló que este terreno para la expansión del colegio público ha sido debidamente limpiado y adecentado para su uso escolar.

Velázquez ha reprochado a la  oposición del PSOE que haya aprovechado esta cuestión para «provocar inquietud a los vecinos con declaraciones alarmistas». Más cuando, recuerda, el socialista fue el único grupo municipal que votó contra la cesión de una parcela a la Junta sobre la que se levantará el nuevo colegio.