La Junta de Gobierno Local aprobó ayer un gasto de 48.000 euros para que 250 niños de la ciudad tengan garantizada su manutención durante los meses de verano. «No podemos permanecer ajenos frente al sufrimiento de las personas, no vamos a dejar en la cuneta a quienes peor la están pasando». La alcaldesa, Milagros Tolón, anunciaba esta medida de urgencia en compañía del concejal de Bienestar, Javier Mateo, y explica que de cara al inicio de curso -en septiembre- dispondrán de otros 52.000 euros para el mismo cometido, a la espera de que la Junta de Comunidades se haga cargo de la ayuda como parte de sus competencias.

Las familias que carecen de recursos suficientes para dar una alimentación básica a sus hijos pueden solicitar la ayuda en el Ayuntamiento de Toledo desde hoy, acudiendo al departamento de servicios sociales ya que serán los trabajadores de esta sección quienes evalúen a los peticionarios y administren la entrega del dinero.

Considerando que es un fin de necesidad primaria se han eliminado trabas burocráticas y para justificar que el destino del dinero es el deseado simplemente tendrán que aportar los tíquets de la compra cuando se les reclamen. Es decir, la ayuda es directa, del dinero líquido en mano, para que estas familias puedan ir a la compra como cualquier otra, con toda normalidad.

Milagros Tolón presenta la medida con «orgullo» porque tan sólo «dos semanas» después de tomar posesión el Gobierno bipartito ha atendido una de las prioridades que formaban parte de ambos programas electorales y del pacto que les ata.

La alcaldesa dice que sólo es una primera medida pero que ya «pone de manifiesto una forma de gobernar» que quiere que presida toda su gestión. A pesar de todo confiesa que no se sentirá satisfecha mientras haya en la ciudad una familia que no disponga de recursos para cubrir sus necesidades básicas.

Javier Mateo agradece la presencia de la alcaldesa por lo que implica de compromiso en las políticas sociales y recuerda que estas ayudas ya tienen antecedentes en el Ayuntamiento provocadas por «la medida más miserable» del Gobierno regional del PP cuando suprimió las becas de comedor escolar rompiendo las políticas de conciliación y dejando a muchos niños «sin una comida decente al día».

Mateo subraya que se trata de una competencia regional pero el Gobierno bipartito municipal no se quiere escudar en planteamientos administrativos y ha tomado «el problema de frente» para crear esta partida global de 100.000 euros que «duplica», tal y como Ganemos prometió, la que existía hasta ahora.

El cálculo que han hecho es para facilitar 4 euros por niño y día pero como los comedores de los colegios cierran por vacaciones se entregará el dinero a sus familias para que hagan la compra.

Por último, Tolón anuncia que va a proponer un «pacto contra la pobreza y la exclusión social» en el que aparte de los representantes municipales quiere que participen las organizaciones sociales que trabajan cada día con colectivos que precisan atención. El PP responde, por medio de su viceportavoz José López Gamarra, que  está dispuesto a participar como ya apoyaron incrementar el fondo de contingencia social propuesto por Izquierda Unida «que provocó que el PSOE retirase el presupuesto» (2014).