La Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos, a fecha 13 de junio de 2014, anunció la resolución por la que se convocaba procedimiento abierto para la adjudicación de las Obras de rehabilitación arquitectónica del Museo Taller del Moro (filial del Museo de Santa Cruz) en Toledo. Publicado en el BOE el pasado 18 de junio, y con un importe total de 436.677, 92 euros (360.890,84 euros netos), la intervención prevista contempla la rehabilitación arquitectónica del edificio principal, fundamentalmente centrada en los paramentos interiores, carpinterías de madera y rejas, limpieza de yeserías, y accesibilidad. Así, y además de la adecuación del edificio para su uso como sala de exposiciones -centrándose en las instalaciones eléctrica, de iluminación y de seguridad, permitiéndose a su vez el uso compatible como salón de recepción y para la realización de actos protocolarios-, se apuesta por una adecuación museográfica básica. Este punto se refiere a la instalación de un sistema flexible de iluminación y a la señalización e información del edificio.

No olvida, el proyecto -firmado por Jorge Ruiz Ampuero- atender a la mejora del espacio exterior adecuando el acceso principal a la parcela, remodelando el espacio ajardinado; los muros y cerramientos perimetrales; y los aseos y la caseta de almacén e instalaciones.

Y puesto que se hace imprescindible la correcta recepción de visitas, despacho de entradas, vigilancia y control tanto del edificio como del propio recinto, se ha planteado la construcción de un pequeño edificio en el exterior, que altere lo menos posible el espacio que rodea al edificio principal. Para ello se ha diseñado un pabellón adosado al muro, medianero con una cubierta plana, con los cerramientos de vidrio prácticamente en su totalidad, ello para permitir, desde este punto, tener un control lo más amplio posible tanto de la zona de acceso a la parcela y al edificio, como a la parte de aseos posterior.

En cuanto a la rehabilitación del edificio principal, contempla la terminación del suelo, mediante una lámina impermeabilizante, aislamiento térmico y pavimento de mármol blanco macael; la reparación del revestimiento de yeso de paredes, aplicándose un nuevo guarnecido y enlucido; y la restauración de la carpintería comprendiendo la sustitución de elementos deteriorados.

Además, las techumbres se limpiarán, y sobre las yeserías se realizará un tratamiento fungicida con la pulverización con una disolución acuosa de oxicloruro de cobre.

Sobre la urbanización exterior, se contempla la sustitución de todos los pavimentos existentes sin alterar prácticamente las rasantes naturales de la parcela, empleándose un pavimento rugoso en dos texturas de granito: losas y adoquinados. También se incluyen las instalaciones de electricidad e iluminación, drenaje y saneamiento.

Y puesto que el impacto de un sistema de rampas era muy agresivo con el entorno, para salvar el desnivel desde la zona de acceso a la parcela a la plataforma de acceso al edificio, se ha optado por sistema de elevación mecánico.