Cómo manipular el clima

I. G. Villota / TOLEDO
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El climatólogo Jonathan Gómez analiza los riesgos de la geoingenería, técnicas de manipulación del clima para revertir el calentamiento global utilizadas por ejemplo en la inauguración de los juegos olímpicos de Beijin para evitar la lluvia

¿Podemos manipular el clima? ¿Podemos conseguir que llueva para mitigar la disminución de las precipitaciones como consecuencia del cambio climático? ¿Es posible evitar justo lo contrario, es decir, que llueva en un momento y en un lugar concreto? La respuesta a todas estas preguntas es afirmativa y está unida a una palabra: la geoingeniería. El geógrafo, climatólogo y experto en Riesgos Naturales Jonathan Gómez Cantero ofreció la tarde de ayer una charla en la Escuela de Ingeniería Industrial de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) donde analizó los riesgos de la geoingenería. Los riesgos de las técnicas de manipulación del clima para revertir el calentamiento global utilizadas por ejemplo en la inauguración de los juegos olímpicos de Beijin para evitar que  la lluvia aguase los fuegos artificiales.

Explicó que este técnica incluye diferentes herramientas tecnológicas que permiten modificar las condiciones meteorológicas de un determinado lugar del planeta. «Dentro de los escenarios del cambio climático en los que se encuentra el planeta con aumento de temperaturas, disminución de las precipitaciones, este tipo de técnicas empiezan a postularse como algo real y algo a lo que podamos intentar ir el día de mañana para mitigar y adaptarnos al cambio climático», recalcó.

Gómez apuntó que la geoingeniería «empieza a convertirse en una herramienta que parece que quieren que sea la que nos salve» aunque cuestionó que «éticamente» sea lo recomendable. «Es una solución demasiado arriesgada, demasiado controvertida y que perjudica al medio ambiente», sostuvo ante unos 50 alumnos de la Universidad regional.

Detalló que esta herramienta contempla varías técnicas que van desde «el bombardeo de nubes para hacer llover, la utilización del yoduro de plata en la atmósfera o los cristales en el espacio para evitar la radiación, hasta fertilizar los océanos, capturar el CO2 y meterlo en las profundidades terrestres», dijo.

El experto consideró que socialmente se debería apostar por «implementar las renovables» y «abandonar los combustibles fósiles» pero lamentó que este tipo de técnicas «empiezan a ser tendencia» y lo serán en el futuro.  

Los casos. «Un futuro bastante próximo porque la geoingeniería ya se ha usado en algunos lugares del planeta», apuntó, recordando ejemplos como los juegos olímpicos de Beijin. «Se estuvo bombardeando el cielo bastantes días antes de la inauguración para que no lloviera y no se estropeasen los fuegos artificiales», dijo.

«Estados Unidos lo empleó en la Guerra de Vietnam o el Canal de Isabel II en Madrid lo ha empleado en la sierra para hacer nevar», continuó el climatólogo, añadiendo que «personalmente considero que para mitigar los efectos estamos a tiempos y podemos llevar a cabo medidas que nos impidan llegar a ese cambio climático extremo».