La organización reconoce que el límite de ozono troposférico de la OMS, 100 microgramos por metro cúbico de aire, es más estricto que el de la legislación española, 120. Con este último parámetro, los afectados por el exceso de contaminación se reducirían en la región a unas 210.000 personas, la décima parte de la población castellano-manchega. La zona más afectada sería el Corredor del Henares.