El 'monopoly' de Toledo se simplifica tras la anulación judicial del Plan de Ordenación Municipal de 2007. La sentencia del Tribunal Superior de Justicia que tumbó por un defecto de forma el último planeamiento urbanístico de la ciudad ya tiene eficacia 'erga omnes' tras su publicación en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha. Y con ella los sectores urbanizables previstos son ya agua de borrajas y las viviendas que había dibujadas sobre el papel también. Aunque habrá excepciones. De momento, el Ayuntamiento de Toledo, a través de la modificación puntual 28 de Plan General de 1986 -que en este momento se encuentra en información pública- salvará el Plan Parcial 23 (PP-23) al tratarse de suelo urbano consolidado. Es el parque comercial de La Abadía, el único sector desarrollado del Plan de Ordenación de 2007. El resto de sectores urbanizables deberán esperar a conocer su futuro a la aprobación de la modificación puntual 29, que el equipo municipal de Gobierno tiene previsto aprobar inicialmente el próximo mes de mayo.