Tráfico se vuelca en atender a las familias de las niñas atropelladas

J.A.J./Toledo
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La Oficina de Atención a Víctimas de Accidentes respalda a los padres. Los centros donde estudiaban las chicas fallecidas guardan un minuto de silencio y efectuarán un homenaje este miércoles

El colegio Tomás Romojaro fue uno de los centros que sumó al minuto de silencio en memoria de las jóvenes fallecidas. - Foto: David Perez

Continúan las muestras de solidaridad de particulares e instituciones hacia las familias de Michelle, Nerea y Ana, las tres menores de Fuensalida fallecidas tras ser arrolladas por un turismo cuando caminaban por una carretera en la mañana del pasado sábado día 22. Ahora ha sido la Dirección General de Tráfico la que ha prestado una atención personalizada a los padres de las jóvenes a través del personal de su Oficina de Atención a las Víctimas de Accidentes de Tráfico. Este novedoso servicio, creado hace dos años, ofrece a las víctimas de siniestros de circulación y sus allegados toda la orientación y asistencia necesarias para que puedan sobrellevar las consecuencias de la violencia vial.

Según ha explicado el alcalde de Fuensalida, Mariano Alonso, la asistencia de estos asesores especializados fue ofrecida personalmente por el Jefe Provincial de Tráfico, Javier Caparrini, por lo que le expresó su agradecimiento en su nombre y en el de las familias afectadas. Los técnicos de la DGT, junto a los empleados de servicios sociales del Consistorio fuensalidano, se reunieron ayer lunes con los padres de las familias para ofrecerles asesoramiento en el amplio abanico de necesidades que precisan, desde consejo legal a apoyo psicológico. «Esta Oficina ofrece información sobre todo tipo de ayuda que existe a su disposición desde la legal a la psicológica», explica el regidor destacando la utilidad de este servicio de Tráfico para que los afectados por un siniestro puedan ir superando un golpe emocional de terribles características.

Este apoyo de la DGT se suma al de expertos movilizados para respaldar a las familias desde otras instituciones como la Junta, la Cruz Roja y el propio Ayuntamiento. El alcalde destaca que las familias de las tres menores se están apoyando «abrazándose entre ellos» para sobrellevar el luto.

Por otra parte, Alonso señaló que también ayer los centros educativos en los que estudiaban las menores también honraron su memoria. Alumnos del colegio público Tomás Romojaro (en el que estudiaba Michelle, de 12 años), del Instituto público Aldebarán (donde era alumna Nerea, de 15 años), y del colegio concertado San José (en el que cursaba estudios Ana, de 16 años) coincidieron en guardar un minuto de silencio  en su recuerdo.

Profesores y alumnos de estos colegios están preparando un acto de homenaje a las chicas, previsto en principio para el próximo miércoles día 26. El director del Tomás Romojaro, Juan Ángel Rodríguez, describía así el ambiente en las aulas  de su centro a las 11 de la mañana, cuando los 700 alumnos y sus maestros han enmudecido para expresar su duelo ante la muerte de su compañera y las otras dos adolescentes. «Es una situación extrema a la que nadie está acostumbrado», comentaba. En este centro se han puesto en marcha protocolos de atención psicológica a los niños, centrados sobre todo en los compañeros de Michelle en sexto de Primaria.

La misma conmoción se vivía en el Instituto Aldebarán y en San José. Una portavoz de este colegio religioso lamentaba la fatalidad ocurrida y añadía que «hemos pedido por el alma de las tres niñas».

Agradecimiento a los medios por su sensibilidad.

El alcalde Alonso, por otro lado, también ha trasladado el agradecimiento de las familias de las menores por el trato  que han recibido de los medios de comunicación en general, destacando la sensibilidad con que han abordado su actual padecimiento.  «Son conscientes de la trascendencia de su caso, y agradecen que no se hayan sacado los momentos más escabrosos de su dolor, ni otras cuestiones desagradables», explicaba el regidor.

Marín pide a los padres que sean «más vigilantes» con sus hijos.

En declaraciones a la Cadena Cope recogidas por la Agencia Europa Press, el consejero de Educación Marcial Marín valoraba la conmoción causada por la muerte de las tres menores de Fuensalida. Desde su propia experiencia como padre de dos muchachas de 13 y 16 años, el consejero señalaba que   «nos ha dejado tan marcados este acontecimiento como para que muchos padres seamos mas vigilantes en los permisos que damos a nuestras hijas y que tengamos la seguridad y la certeza de que no se puedan cometer estas circunstancias que se han dado con el fallecimiento de estas tres jóvenes».

Marín añadía que ahora es el momento de arropar a las familias y que luego será tiempo de analizar lo ocurrido «para que no vuelva a producirse».