José Luis Martín Cerdeño va camino de los 50 años y de los 100 medios maratones. Entre tanto, no ha dejado de correr maratones y su última incursión llegó el pasado 27 de septiembre en Zaragoza, donde completó su vigésimo sexta prueba de Filípides, y en 24 de ellas terminó por debajo de tres horas. Unos datos que el atleta del Bikila guarda con mucho cariño y que le convierten en uno de los populares con más kilómetros en las piernas.

En el año 1986 debutó en la distancia con sólo veinte años. Fue en el Mapoma, en Madrid, y la experiencia no salió del todo mal, con un tiempo de 3 horas y 12 minutos. Al año siguiente repitió en la capital de España, pero la falta de control por su juventud e inexperiencia le jugó una mala pasada y concluyó deshidratado con más de 3:20. A partir de entonces nunca ha superado la barrera de las tres horas y todos los maratones están en una horquilla que va de los 2:27.19 que marcó en San Sebastián en el año 1991 a los 2:59.38 del Maratón de Murcia de 2014.

En esta ocasión, entró en la línea de meta de Zaragoza en 2:57.04, de nuevo por debajo de tres horas. La mañana amaneció nublada y con una excelente temperatura de 14 grados centígrados para cubrir los 42 kilómetros. Pronto apareció el primer inconveniente, el viento, «a veces impertinente dependiendo de la dirección y el trazado del circuito», como asegura el propio corredor. De todos modos, Martín Cerdeño destaca la buena organización y la logística empleada para llevarla a cabo. En cuanto al circuito, éste contenía «algunas subidas en la primera mitad», pero favorable para los más de 1.300 participantes.

Una liebre de lujo. El toledano encontró en Carlos Mayo una liebre de lujo que le llevó al medio maratón a un ritmo para acabar en 2 horas y 25 minutos, el tiempo que empleó el ganador, José Antonio Casajús. Las sensaciones digestivas de Pepelu, como se le conoce en el mundo atlético, fueron «regulares» en el primer tercio de carrera. Mejoró en la segunda parte, tanto que fue capaz de doblar el ritmo, de 1:27.45 a 1:29.19, hasta los 2:57.04 finales que le permitieron ocupar el puesto 30 de la clasificación general. Su actuación le deja «bastante contento», pues ha logrado rebajar en dos minutos y medio la marca de su último maratón, hace casi un año. «A mi edad ya es bueno mantenerse, así que mejor aún lo es bajar un poco si se puede», asegura el Martín Cerdeño.

Ahora es el momento de que el organismo se recupere del esfuerzo de una prueba tan exigente. Quiere seguir adelante con su reto de llegar a los cien medios maratones en abril de 2016 en Toledo. Ya contabiliza 94 y el número 95 puede caer este mes o el que viene. Y es que se está pensando participar en la Cigarra Toledana del 8 de noviembre, con salida y llegada en el Cigarral del Ángel Custodio.