Mercedes afronta una nueva batalla en Las Américas

Agencias / Austin
-

El inglés Lewis Hamilton está más cerca del título, pero Rosberg aún puede arrebatárselo

Mercedes afronta una nueva batalla en Las Américas

El Mundial de Fórmula Uno, que ha vivido tres semanas de descanso tras visitar Rusia, inicia su recta final de tres carreras con la disputa este fin de semana del Gran Premio de Estados Unidos, donde Lewis Hamilton y Nico Rosberg, una vez asegurado el título de constructores para Mercedes, se centrarán exclusivamente en su batalla individual por alcanzar el entorchado de pilotos.

Hamilton se encuentra en plena forma camino de su segundo título, como demuestra su segunda racha de cuatro victorias consecutivas de esta temporada, en este caso encadenando jornadas de gloria en Monza, Singapur, Suzuka y Sochi. Este domingo podría convertirse en el primer británico en ganar 10 carreras en el mismo año, así como igualar a sus compatriotas Nigel Mansell y Jim Clark con el quinto triunfo consecutivo.

Sin embargo, la enorme superioridad de Mercedes también se ha traducido en una escasa renta de 17 puntos sobre su compañero Nico Rosberg, por lo que un simple abandono podría generar un vuelvo total en la clasificación.

Pese a que no gana una carrera desde julio, el germano no ha perdido la regularidad con cuatro segundos puestos en las últimas cinco pruebas y tan solo la retirada en Singapur le ha impedido ocupar el liderato a estas alturas de la campaña, cuando el ‘gran circo’ afronta su decimoséptima cita del Mundial a falta de visitar Brasil y Abu Dhabi, carrera final que repartirá el doble de puntos.

Los precedentes en el circuito de Las Américas, que acogerá la Fórmula Uno por tercer año consecutivo, sonríen al británico, quien se proclamó vencedor en la prueba inaugural, al volante de McLaren, y fue cuarto el año pasado. Por su parte, Rosberg se quedó fuera de los puntos hace dos temporadas, decimotercero, y concluyó noveno en 2013.

Miles de rumores. Fuera de la inaccesible batalla entre los ambos, el resto de la parrilla se encuentra inmerso en pequeñas disputas, como el tercer puesto, que tiene casi asegurado Daniel Ricciardo (Red Bull).

En realidad, el gran asunto que preocupa a casi todos los que no conducen una ‘flecha plateada’ es su futuro, ya que siguen sin resolverse muchas incógnitas de cara a la próxima temporada. De hecho, en la ‘zona noble’ de los pilotos el único que ha movido ficha es Sebastian Vettel, aunque ni siquiera ha confirmado su destino tras abandonar Red Bull.

Han sido directivos como Luca di Montezemolo o Helmut Marko los que han arrojado algo de luz de cara a 2015, dejando entrever la marcha de Fernando Alonso de Ferrari y la llegada del germano. Por el momento, el español (141 puntos), que ya solo aspira al cuarto puesto en una pelea con Botas (145) y el propio Vettel (143), aún no ha confirmado ni desmentido nada, y la única pista podría ser que McLaren ha estrenado la versión en castellano de su página web.

Mientras todos estos asuntos se cocinan en el ‘paddock’, sobre el asfalto se verá la carrera con menos monoplazas desde 2005, apenas 18, después de que Marussia y Caterham renunciaran a participar por problemas económicos. En un circuito diseñado por Hermann Tilke con partes de otros trazados del calendario, con tiempo soleado y temperaturas agradables, la calificación se disputará mañana a las 19,00 horas y la carrera, el domingo a las 21,00.

Crítico, pero estable. Por otro lado, el francés Jules Bianchi se mantiene «crítico pero estable» de acuerdo al último comunicado emitido por su familia, que aclaró que el piloto continuará su recuperación en Japón, desmintiendo las informaciones que apuntaban a un posible traslado al hospital suizo donde fue tratado Michael Schumacher. «Su condición continua crítica, pero estable. Aunque no tenemos nueva información que aportar, reconocemos a la gran cantidad de gente alrededor del mundo que está apoyando a Jules y motivándole en su lucha».