La Junta de Distrito de Santa Mª de Benquerencia aprobaba ayer, con los votos a favor del PSOEe IU y la abstención del PP, instar a la Junta de Comunidades y al propio Ayuntamiento a ponerse «de acuerdo» y trabajar de forma conjunta para urbanizar el primer sector de la ampliación de la zona industrial, aunque para ello sea necesario ajustar necesidades e ingresos, de modo que la planta de Casbega se instale allí.
Una proposición que con carácter de urgencia llevaba la Asociación de Vecinos ‘El Tajo’ al pleno de la Junta de Distrito, donde a pesar de la oposición de la representante del PP, Ana Isabel Bejarano, se debatió sobre la alternativa de ubicación que desde la Consejería de Fomento se habría trasladado a Casbega.
Un debate en el que Bejarano se resistía a entrar, asegurando que no tenía información al respecto «para poder opinar y votar», por lo que defendía que el debate debía aplazarse, y así pedir la información sobre el asunto a la Junta. La edil popular aseguraba que lo que realmente interesa es que venga Casbega, ya sea «aquí o al otro lado», una afirmación que tuvo respuesta por parte de los vecinos que se encontraban entre el público.
Esta posición la de la edil popular que desde ‘El Tajo’, su presidente, Emiliano García, ya fuera de la sala de plenos, consideraba de «una incongruencia brutal», al no comprender cómo el Sr. Gamarra, también concejal del PP «sí dispone de esa información y ella venga diciendo que no la tiene», cuando ya el propio portavoz del Gobierno regional, Leandro Esteban, horas antes, había confirmado la existencia, ante los medios de comunicación de «una posibilidad cierta» de que se pudiera instalar en los terrenos del Barrio Avanzado. Unas declaraciones que puso sobre la mesa el representante de IU, Aurelio San Emeterio, quien se mostraba convencido de que «si se quiere» sí puede haber otras alternativas al Barrio Avanzado.
Por su parte desde la Asociación de Vecinos ‘Progresistas Amigos del Polígono’ apoyaban la proposición de ‘El Tajo’, y su representante, Juan Hernández Salmerón, calificaba el anuncio realizado por Gamarra como «una maniobra de distracción».