El nuevo acceso a la cámara bufa se estrena a mediados del próximo mes

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El objetivo de esta intervención ha consistido en ofrecer una nueva imagen a un enclave que se encuentra en el eje de la conexión peatonal entre Zocodover y la Estación del AVE

El nuevo acceso a la cámara bufa se estrena a mediados del próximo mes - Foto: Yolanda Lancha

En la última Comisión Ejecutiva del Consorcio se dio cuenta del acta de replanteo de las obras de instalación de una cámara bufa en la plaza de las Concepcionistas. Esta intervención, mínima en el tiempo, va a presentarse a mediados del próximo mes de noviembre con una exposición. El encuentro servirá la inaugurar los trabajos de mejora desarrollados en el espacio y la instalación de la nueva entrada al recinto.

A pesar de que esta zona fue rehabilitada hace diez años, el visible deterioro del acceso ha obligado a plantearse el proyecto para ofrecer, como se justificó en su día por parte del Ayuntamiento, «una imagen renovada en el eje de conexión peatonal  entre Zocodover y la estación del AVE».

Estas labores culminan un proyecto iniciado en el año 2001 por parte del Consorcio de la ciudad con el fin de proceder a una restauración intregral del convento de la Concepción Francisca. Por ello, y orquestados en torno a un equipo multidisciplinar que ha ido adaptando las actuaciones y sus fases dependiendo de las necesidades de cada momento y de los hallazgos localizados, la intervención tuvo en cuenta el estado de conservación del convento y las mayores prioridades.

Así, y acometiendo el proyecto referido a la mejora de las cubiertas y los suelos en las zonas comunes y de tránsito, y la recuperación de la capilla de San Jerónimo, se descubrió una cripta junto a la base de la torre que no pudo estudiarse ni restaurarse en su momento, razón por la que desde el Consorcio se amplió el programa para recuperar la cripta y todas las dependencias anexas. Se aprovechó, además, para restaurar la torre y para acondicionar la cámara de ventilación para su visita.

Hay que recordar que estos trabajos se centraron en la excavación completa de un espacio que se halló colmatado de escombrosy en el que se recuperaron las yeserías situadas junto a la torre y la capilla de los Francos. Como no podía ser de otra forma, la intervención buscó adecuar las instalaciones para su uso como espacio visitable. En este punto, se comunicó esta zona con el interior de la iglesia para permitir la visita de las capillas laterales situadas en el lado derecho del templo sin interferir en el espacio privado de la vida conventual.

En cuanto al proceso realizado en la cámara ventilada, fue dotada de un equipamiento museográfico destinado a propiciar un doble uso como lugar de exposiciones y punto de interpretación del convento.

No faltó la sorpresa, como es habitual en este tipo de proyectos arqueológicos emprendidos en la ciudad, porque en febrero de 2006 apareció un importante conjunto de monedas del siglo XIV oculto en la parte superior de un muro en el transcurso de los trabajos de ejecución de la conexión de la cámara bufa con la cripta del convento.

Las primeras monedas se descubrieron en la base de esta capa tapial y luego se procedió a limpiar toda la superficie para retirarlas, lo que permitió descubrir una acumulación de monedas que debieron ser enterradas en un pequeño saco. Las monedas aparecieron aisladas y también formando pequeños paquetes de 15 ó 20 unidades, más unos cuantos grupos mayores que conservan la forma de la bolsa.

En el paquete mayor, se observaron unos restos del tejido pertenecientes a la bolsa de tela en la que fueron enterradas las monedas que se encuentran en buen estado de conservación.

Por las características del conjunto, se asumió que pudieran ser monedas de vellón (aleación de cobre y plata) de entre finales del siglo XIV y principios del XV, al presentar gráfilas lobuladas y motivos de castillo y león rampante.