«¿Nos podemos quedar un rato?»

C. S. Jara
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La Reina preguntó a su equipo si había tiempo para quedarse un rato más en el que conversó y compartió fotografías con los premiados, sus familias y diferentes autoridades.

«¿Nos podemos quedar un rato?» - Foto: Peña

A la Reina se le hizo corta ayer la hora larga del acto oficial de entrega de los premios Ciudad de Talavera. «¿Nos podemos quedar un rato?», era la pregunta que lanzaba al equipo de la Casa Real, cuando volvía sobre sus pasos para dedicar unos minutos más a los premiados de este año con la mayor distinción que ofrece Talavera. Cordial y accesible, Doña Sofía llegó al teatro Palenque poco después de las doce de la mañana, acompañada por la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, y el alcalde de Talavera, Gonzalo Lago. Ante un auditorio lleno que la recibió con una ovación entusiasta, la Reina recorrió el pasillo central del teatro, para dirigirse a la mesa presidencial, desde donde dirigió la ceremonia.

Vestida para la ocasión con un traje chaqueta en un genuino azul talaverano, la estancia de la Reina de España en la ciudad fue breve. En el vestuario de los asistentes, abundaron los detalles de todas las gamas de azules; en una mañana desapacible Cospedal eligió el traje pantalón y un tono más alto que la Reina, con quien compartió confidencias en varias ocasiones a lo largo del acto.  Ambas parecen haber intimidado después de que, como recordó la presidenta regional, sea la tercera visita que realiza a la provincia en el plazo de pocas semanas.

La ciudad de la reina. La Reina llegó y se marchó en helicóptero, y en la hora y media que permaneció en la ciudad tuvo tiempo de dejar una gran impresión entre los talaveranos. En todo caso, no menor que la que pudo llevarse ella misma, objeto de una cascada de agradecimientos y homenajes en las intervenciones, puesto que no en balde le llegaban de la ciudad que, como se recalcó en varias ocasiones, la lleva en su apellido.

Doña Sofía también pudo sentir el calor popular en gestos como el ‘viva la reina’ que la recibió a su entrada al patio de butacas del teatro y, de forma muy especial, en la intervención del director técnico de la Real Academia de la Historia, el talaverano Jaime Olmedo, que  repasó en una brillante intervención las coincidencias de la monarca actual con la reina María de Portugal, hijas ambas de reyes y llegadas de otros países. AGrecia y al IV Centenario del Greco que se conmemora este año, le dedicó también un apartado de su erudita intervención, que continuó citando el interés de la Reina por la historia y redondeó con una frase en la que supo resumir el sentir del resto de los intervinientes: «Talavera es hoy, señora, más de la Reina que nunca».   

El acto, más sobrio de lo habitual, abundó en alusiones a Talavera y al carácter hondamente popular de la fiestas de Mondas que viven estos días su apogeo. La actuación de la Banda de Música relajó la solemnidad, con un breve concierto de piezas dedicadas a la ciudad de la reina, que se cerró con la más popular de todas, la jota «Las talaveranas», de Ricardo Fandiño, instituida desde 2010 como el colofón de este acto.

Además de muchos halagos, la Reina se marchó de Talavera con un par de abanicos pintados a mano expresamente para ella con motivos de cerámica talaverana. Uno de ellos, de Rafael García Bodas, el ceramista que recogió el premio a la Identidad Local y Comarcal, y otro que le obsequió Pilar Clavero, esposa del alcalde talaverano. Gonzalo Lago tuvo ocasión de recibir también el apoyo y calor de sus paisanos y de la presidenta Cospedal, quien tuvo un inciso inicial para darle las gracias por la iniciativa de pedir a la Reina la presidencia del acto. «Por eso y por mucho más», enfatizó la presidenta en su reconocimiento al alcalde.   

En su intensa visita a Talavera,  la invitada especial se fotografió con los premiados y sus familias, en un breve aparte antes de abandonar el teatro, al igual que con los concejales y otros representantes públicos presentes en el acto e, incluso, tuvo ocasión de saludar a la familia, ya que entre los presentes en el Palenque se encontraban los propietarios de la bodega Capilla del Fraile de San Bartolomé de las Abiertas, con parentesco directo con el Rey.

En los próximos días le llegará a la Zarzuela un recuerdo para añadir a esta visita. La escultura del popular carrito de las Mondas, del Centro Cerámico Talavera, que representa a estos premios y con la que el Ayuntamiento ha querido obsequiarla, como una premiada más.