La Escuela de UDAT imparte formación a algo más de 150 chicos. Y es que es una cantera que crece cada curso como así lo explica el presidente del club, Valentín de Pablos: «Temporada a temporada vamos viendo como se incrementa el número de participantes. Este año ha superado esa barrera de 150 y lo que vamos viendo después de varios años con la Escuela son los frutos con los éxitos obtenidos por estos chavales que empezaron de pequeños y hoy en día están en categorías superiores y compitiendo actualmente en campeonatos de España».

Los chicos están divididos en cinco grupos y de cada uno de ellos se encarga un monitor: benjamines, alevines, cadetes y juveniles, junto a júniors y promesas.

Los atletas federados están integrados en la Escuela:«Luego compiten en una serie de pruebas en las que a lo mejor otros niños no pueden. Eso va un poco en el pensamiento del niño: si quiere participar un poco más en serio, a nivel de Edad Escolar, es decir, según el objetivo que él tenga se federa o no», indica el director de la Escuela, Pedro Rodrigo.

Cada joven se integra en un grupo no solo por los años que tiene, sino «por su edad atlética», o sea, si ya llega con una base en este deporte. Cuando un niño llega a la Escuela, «nos gusta pruebe, que vea como funciona el club y el grupo, que se integre y se sienta bien. En el momento en el que esté a gusto y al padre le pide venir, le decimos que haga la inscripción y que pertenezca al club».

Por supuesto, la labor diaria se planifica acorde a cada grupo:«En los pequeños se trabaja mucho a través de los juegos, la coordinación, de circuitos;luego, según vamos subiendo en edad y en los grupos, se van viendo las diferentes disciplinas atléticas: longitud, triple salto, salto de altura, pruebas de velocidad, resistencia...; probando un poquito de todo para que cuando ellos con un edad decidan que pruebas les gustan más, tengan la técnica adquirida y puedan hacerlo».

En este sentido, hay que resaltar que empieza a haber atletas en UDAT con excelentes resultados en otras disciplinas que no han sido tradicionalmente en las que han destacado los deportistas talaveranos: «Era uno de los objetivos en esta nueva trayectoria, es decir, no solo el campo a través como se venía haciendo, sino ampliar un poquito más el atletismo: longitud, triple salto...; parece ser que los objetivos poco a poco se van cumpliendo porque tenemos gente que hace jabalina, vallas, triple salto, longitud o pértiga».

La temporada que está a punto de finalizar ha estado cargada de éxitos en la Escuela. Y en este sentido, Pedro Rodrigo matiza que «han salido todos de la Escuela, mientras que la mayoría funcionan con fichajes de otros clubes». Por ello, son un orgullo para UDAT todos aquellos atletas que consiguieron mínimas para campeonatos de España, «porque creo que somos al final maestros y lo que formamos son personas y si sale un deportista bueno, mejor».

El grupo de competición está formado por Sergio Paniagua, Mohamed El Ourzadi, Alba Fernández Patón, Julia Montejo, Cristóbal Ávila y Andrés Oliva y todos ellos están entrenados por Javier García Sabrido. Los objetivos planteados para ellos «esperamos que sean los mismos que el año pasado si no a nivel individual, que fue un éxito, sí por lo menos en cuanto equipos federados en los Campeonatos de España de Campo a Través donde el  año pasado fueron seis y queremos que en esta ocasión sean por lo menos cinco. Y en pista conseguir al menos los que fueron y alguno más».

Pero algunos de estos jóvenes va más allá y es el caso de Sergio Paniagua que «ha planteado como objetivo ir al Campeonato de Europa. La planificación está para eso, a ver si tiene un poco de suerte». Pedro Rodrigo recuerda que este atleta ya participó con la Selección Española en el Campeonato del Mundo en Edad Escolar en Malta; y junto a esto, es campeón nacional de 800 metros lisos en categoría juvenil y bronce en el 1.000 en cadete. Por tanto, «lleva una larga trayectoria deportiva y esperemos que pueda redondearla este año».

Valentín de Pablos, por su parte, incide en el hecho de que en la Escuela se forma al niño más allá del atletismo: «Hemos conseguido una de las metas a la que queríamos llegar que es formar a estos niños para el día de mañana».

La Pista de Atletismo es más que adecuada para el trabajo diario de UDAT, pero su falta de homologación impide la celebración de pruebas federadas: «La homologación es un tema burocrático y ahí está parado. Rondaría los 2.500 euros porque la Federación Española tiene unos precios. Cuesta un dinero, pero si lo miras a medio y largo plazo, tampoco es un gran capital.». Y se da un hecho curioso y es que tras la reforma «ahora la pista está mejor que antes porque el problema anterior era que las calles no estaban condiciones, pero como no está homologada, no puede haber pruebas».

Así es el trabajo de base en un deporte, como así lo demuestran, sobre todo, las pruebas populares, que lleva años ganando adeptos.