'Batalla de San Marcial', fondo sobresaliente

e. martín | TOLEDO
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El Museo del Ejército acogió un acto para conmemorar el II centenario del final de la Guerra de la Independencia, en donde se donó un cuadro de Augusto Ferrer Dalmau

La obra hace alusión a la última batalla campal que tuvo lugar sobre suelo español.

El Museo del Ejército acogió ayer la finalización de la conmemoración del 200 aniversario de la Guerra de la Independencia con un acto en el que la institución recibió un elemento más para su colección estable que, de este modo, entra a formar parte de los Bienes de Interés Cultural del patrimonio histórico español. Se trata de un cuadro cuya realización fue encargada el pasado año 2013 por el Instituto de Historia y Cultura Militar (IHCM) al pintor Augusto Ferrer Dalmau y que representa la batalla de San Marcial, última batalla campal que tuvo lugar sobre suelo español y una de las victorias señaladas de la guerra. Aunque el artista no pudo acudir en la pasada jornada al Museo del Ejército, sí lo hizo un representante de la familia Aperribay de San Sebastián, que ha patrocinado la obra, que cuenta también con un libro explicativo.

El acto comenzó en torno a las 12,30 horas con una representación histórica en la puerta del Museo del Ejército y que corrió a cargo de un piquete de seis personas con uniformes de época del año 1814 que pertenecían a la Asociación Histórico Cultural Voluntarios de Madrid.

Presidió el general director del Instituto de Historia y Cultura Militar, Enrique Vidal del Loño, quien durante su intervención destacó que la institución a la que respresenta tiene cuatro líneas de trabajo como la protección, conservación, investigación y divulgación del patrimonio histórico del Ejército de Tierra. Asimismo, indicó que el Instituto cuenta con un buen número de investigadores sobre este acontecimiento histórico, ya que «entender nuestra historia es entender nuestro presente». «En la Guerra de la Independencia está el origen y las claves del siglo XIX, del  siglo XX e incluso del XXI». Escucharon sus palabras algunos invitados como los agregados militares de los ejércitos de Francia, Gran Bretaña, Polonia, Alemania, Italia, Irlanda, Bélgica y Holanda así como asociaciones de veteranos y  personalidades culturales y docentes que están relacionadas con estudios y publicaciones sobre esta guerra que culminó en el año 1814. Ayer se recordó su fin, pero fue en 2008 cuando se llevó a cabo un acto institucional para celebrar el II centenario de su inicio en el Palacio Real de Madrid y presidido por el Príncipe de Asturias. Asistieron embajadores de los países que aportaron contingentes de tropa a la contienda.

Así las cosas, la organización también consideró relevante llevar a cabo un acto de homenaje a los combatientes españoles y de recuerdo al resto de países beligerantes en el II centenario del final de la guerra marcado por la presencia de tropas españolas en la batalla de Toulouse el 14 de abril de 1814 y las últimas escaramuzas el 24 de abril.

guerra internacional. Leopoldo Stampa Piñero, embajador de España y exdirector general de Relaciones Institucionales y de Patrimonio Histórico del Ministerio de Defensa, pronunció una conferencia sobre el significado de este acontecimiento en la que quiso hacer hincapié en que «tanto en sus causas como en sus efectos la Guerra de la Independencia fue una guerra internacional», a lo que añadió que «la presencia militar en España es hoy un activo consolidado». Para finalizar, tomó la palabra el general director del Museo del Ejército, Juan Valentín Gamazo de Cárdenas, quien agradeció la donación del cuadro que «es ya un fondo sobresaliente de nuestra colección».