Ricardo de Pedraza no se ha olvidado de Río de Janeiro. 2016 le ha traído ilusiones renovadas y más esfuerzos por participar este verano en los Juegos Paralímpicos que se celebrarán en la ciudad brasileña. El atleta talaverano ha encontrado guía y ya está entrenando duro para alcanzar la mínima que la abra las puertas de la competición deportiva del año. Sin embargo, no contar con la beca CLAMO le ha obligado a realizar un sacrificio económico que, desde su punto de vista, puede acercarle al objetivo. Tiene que desplazarse todos los días hasta Madrid para ejecitarse en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de la Blume, con los gastos que conlleva.
Pero antes, el corredor del Club Atletismo Toledo tuvo que superar la enésima lesión, en este caso en el pie. Luego le tocó buscar un guía de garantías, que el de la Ciudad de la Cerámica ha hallado en Brendan Medeiros, un corredor portugués de origen norteamericano que realiza las funciones de liebre en el grupo de Antonio Serrano y que ya venció en Toledo en el Cross Popular de la Espada. Desde su punto de vista, «no he podido tener más suerte, es un chico joven que tiene muchas ganas y que va muy bien en la pista». Y es que el gran caballo de batalla de De Pedraza era encontrar a alguien que se adaptase bien al tartán, algo que le ha costado menos a él tras darse cuenta de que el camino a Río por el maratón era mucho más pedregoso.
Así las cosas, el talaverano se está ejercitando a tope para estar al máximo nivel en los meses de mayo y junio, cuando se disputarán las competiciones en las que debe optar a la mínima B en los 1.500 metros de cara al Campeonato de Europa. Es la vía más sencilla para obtener la plaza olímpica, porque «la mínima A es una marca imposible». Con el registro en el bolsillo, debería lograr una medalla en el Europeo para tener segura su presencia, aunque con escalar posiciones en el ranking mundial y situarse entre los cinco primeros podría ser suficiente. El día 12 de marzo se presentará al primer control federativo en Alfaz del Pi (Alicante), mientras que en abril acudirá a un Mitin Internacional a Italia. Ya en mayo llegarán varias pruebas entre las que se encuentra el Campeonato de España.
De todos modos, De Pedraza quiere dar pasos con mucha cautela y, por eso, lo primero es «ver las sensaciones y cómo me voy adaptando a la pista». Por lo pronto, recalca que está asimilando bien el entrenamiento y que en la Blume tiene acceso a unas condiciones óptimas para ponerse a punto. Que su guía Brendan sea atleta específico de 1.500 metros ayuda más aún, ya que «me corrige en la pista y es muy rápido; lo hace con todas las ganas y toda la intención de apoyarme». Por lo demás, el talaverano quiere incidir en el desembolso económico que le está suponiendo viajar a diario a la capital de España. Sólo cuenta como apoyo institucional con una pequeña ayuda de la Junta. En cualquier caso, ni nada ni nadie se va a interponer en el sueño de Ricardo de Pedraza de regresar a unas Paralimpiadas.