El delegado del Gobierno en la región, José Julián Gregorio, visitó ayer el palacio de la familia Rivera, señores de Malpica y Parla, de Valdepusa y San Martín, uno de los más importantes palacios del Toledo renacentista en el que se encuentran las oficinas de la Demarcación de Carreteras del Estado en Castilla-La Mancha. El edificio, adquirido por el Gobierno en 1950 al duque de Bailén, se declaró Bien de Interés Cultural en 1966 «por su importancia y su enclave» ya que como indicó el delegado «es uno de los mejores ejemplos de casas-palacio en Toledo, se construyó en el siglo XVI, época de la que se conserva una torre, así como otros elementos».
El Ministerio de Fomento en la partida presupuestaria de ‘Vivienda y arquitectura’ incluye para 2016 un montante de 2,4 millones de euros «para adecuar el edificio a los menesteres y nuevos cometidos, y afianzar sobre todo su valor histórico y darle esa utilidad tan importante en una zona histórica como el Casco de Toledo».
En este sentido, Gregorio subrayó que a este tipo de edificios hay que dotarles de utilidad para que el Casco Histórico «siga siendo algo que todos podamos disfrutar». La inversión se realizará en tres ejercicios económicos, siendo para 2016 de 600.000 euros para la redacción del proyecto y el inicio de las obras, mientras que en 2017 y 2018 «habrá 900.000 euros para finalizar la rehabilitación de este palacio».
Así, el delegado del Ejecutivo central en la región recordó que esta partida «es la apuesta del Gobierno central por el patrimonio de Castilla-La Mancha, por el patrimonio de Toledo, ciudad Patrimonio de la Humanidad».
Otros dos proyectos. Además de la intervención en el Palacio de Malpica, los Presupuestos Generales del Estado para 2016 incluyen otras dos partidas en relación al patrimonio toledano, como la oficina única del Museo Sefardí y del Greco tasada en 2.148.230 euros, de los cuales 1,5 millones se liberarán en 2016 y los 600.000 restantes a lo largo de 2017, para la rehabilitación de tres inmuebles; y una intervención de mantenimiento para el Monasterio de San Juan de los Reyes con 665.970 euros.
«Es un esfuerzo muy importante para la capital de Castilla-La Mancha y para que edificios emblemáticos se rehabiliten y estén adecuados, sean útiles para que nuestros Cascos Históricos no se queden despoblados», apuntaba Gregorio antes de visitar las instalaciones en las que desde 1933 se encuentra la Demarcación de Carreteras del Estado en la región.