Dice que está esperando a que las asociaciones formen una comisión para debatir pero que esta legislatura no hay tiempo para aplicar lo que se acuerde.

Comenta que la carta de El Ciudadano pidiendo cambios es de julio, que ella pidió un informe jurídico que llegó en agosto, que eran vacaciones y la entregó en mano a los vecinos en septiembre.

Ahí se dice qué se puede y qué no se puede tocar. Por ejemplo, los acuerdos vinculantes son inviables: «tanto oposición como asociaciones se empeñan en la vinculación y saben que no puede ser un proceso vinculante salvo que limites tanto como hemos tenido que hacer con los presupuestos participativos. ¿Por qué son vinculantes? Porque es un dinero destinado a unas obras con unas características. Si vamos a limitar la participación de la ciudadanía a que tiene que ser vinculante los consejos de participación… pues es que no hay mucha participación en la ciudadanía», diserta.

Luego añade que quedó en que las asociaciones formen una comisión para debatir los cambios y que vengan a negociar: «yo no tengo esa comisión», así que no hay debate por ahora.