Tras el fallecimiento este domingo de un joven irlandés de 19 años por ahogamiento en Las Lagunas de Ruidera, todo ha vuelto a la normalidad en este parque natural característico por sus maravillosas aguas que constituyen un total 15 lagunas, ubicadas entre la provincia de Ciudad Real y Albacete. El alcalde de Ruidera, Pedro Reinosa, en declaraciones a La Tribuna, lamenta lo ocurrido e insiste en que se trata de una caso «fortuito», pues «el joven, que al parecer era un buen nadador, estaba prácticamente a 40 metros de la orilla» de la Laguna Salvadora, donde se produjeron los hechos. La víctima se encontraba en España participando en un campamento lingüístico alojado en el complejo turístico El Retiro de Don Quijote en Villanueva de los Infantes.
A la espera de que la autopsia confirme de que el joven falleció ahogado, ésta sería la primera muerte registrada en Castilla-La Mancha hasta el 15 de julio de este año por ahogamiento en espacios acuáticos. Reinosa apenas recuerda la última vez que alguien perdió la vida en Las Lagunas por los mismos hechos, quizás hace más de siete años, lo que demuestra que es un lugar «tranquilo». De hecho, y según la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, que cuenta con un registro de víctimas por ahogamiento a nivel nacional desde el año 2015, constata que en los últimos años «no se ha producido ningún accidente en Ruidera». Y es que, la seguridad está implantada en cada una de las 15 lagunas del parque con la presencia de al menos un socorrista. Así, en la laguna del Rey, cuya gestión corresponde al Ayuntamiento de Ruidera, se cuenta con dos socorristas en los meses de julio y agosto en horario de once de la mañana a ocho de la tarde, pero a pesar de ello «la gente se baña en cualquier sitio y no se centra exclusivamente en las zonas acondicionadas por el baño en las que se cuenta con socorristas», comenta el regidor de Ruidera para a continuación señalar que «si no existe una causa externa como un corte de digestión, las lagunas no entrañan ningún peligro ajeno a lo que es el propio agua, siempre y cuando se sepa nadar y se respete las normas», subraya.
De todas las lagunas, manifiesta Reinosa, algunas tienen mayor profundidad que otras como son la del Rey y la Colgada con 22 y 24 metros de profundidad. En la Salvadora, donde se encontró el cadáver del joven, es de unos 18 metros, pero es «donde se producen la mayoría de las muertes». El motivo, explica el alcalde de Reinosa, «porque es donde más gente se baña, tiene muy poca playa y el fondo es repentino». Pero en ninguna de las 15 del complejo lagunar «existen remolinos como así se piensa la gente», manifiesta el regidor, quien se ha bañado en todas ellas. «Las Lagunas de Ruidera son seguras, pero hay que tomar las mismas precauciones que si nos bañamos en el mar o en la piscina».
Repatriación del cadáver. Fuentes de la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha informaron a este medio que ya se iniciaron los trámites para repatriar el cadáver a Irlanda, por lo que se prevé que en los próximos días el cuerpo del fallecido viajará al país de la Unión Europea, ya que «al ser una país comunitario facilitará los trámites».