Es evidente que, estudiandolos precios actuales del mercado, es un buen momento para hacerse con una vivienda, ya que lo que hay que desembolsar por adquirir un inmueble ha registrado  un abaratamiento  interanual del 3,9% en el segundo trimestre del año, frente a la caída del 6,7% del primer trimestre y la del 8,3% con que cerró 2013, según el Índice de Mercados Locales de Tinsa. 

 De esta forma, el ajuste del coste de los inmuebles suma ya el 39,6% desde los valores máximos alcanzados en el último trimestre de 2007, cuando comenzó la crisis, y se sitúa en niveles de 2003. 

 Tinsa destaca que algunas zonas, como son las islas Baleares y Canarias, ya registran aumentos interanuales de precios, si bien de un leve 0,1%. Asimismo, los archipiélagos, la costa mediterránea y las áreas metropolitanas presentan subidas del 2,25, el 0,4% y el 1%, respectivamente, entre los meses de enero a junio.

Ante estos datos, la sociedad de tasación consideró que los precios de la vivienda manifiestan una «clara tendencia a la estabilización». La firma mantiene su previsión de que dejarán de caer y se mantendrán a cierre de 2014.

En cuanto al mes de junio, las mayores caídas del ladrillo se contabilizaron en la costa este, donde la vivienda se abarató a una tasa del 7,1% interanual, y en las capitales y grandes ciudades, con caídas del 4,8%.

En las áreas metropolitanas, los pisos se devaluaron un 3% los últimos 30 días, caída que se limitó al 0,1% en el resto de municipios. En las islas, la vivienda repuntó un 0,1% en junio.

Respecto a la evolución que el mercado presenta desde el inicio de la crisis, la contracción más abultada sigue siendo la región Mediterránea, con un ajuste del 46,9%. Tras este área, se sitúan las capitales y las grandes ciudades, que suman un descenso del 44,3% desde 2007, y las áreas metropolitanas, con un 42,3%. De su lado, Baleares y Canarias acumulan una caída del 28,1% en el precio de los pisos y el resto de municipios, del 33,3%.

En cuanto a los precios de los pisos usados, cayó un 0,8% en junio y acumuló una rebaja en el segundo trimestre del 1,5%, mientras que el descenso en los tres primeros meses del año fue del 0,2%, según Hogaria.net. Por este motivo, la opinión del portal contrasta con la de los tasadores al asegurar que «la estabilización de los precios parece ahora más lejos» y señala que los datos del primer trimestre «fueron un espejismo», puesto que la variación interanual desciende una décima, hasta el 7,4%. De esta forma, el precio de la segunda mano finalizó junio con un precio medio del metro cuadrado a nivel nacional de 1.605 euros, frente a los 1.618 euros de mayo.

 Por otro lado, la compraventa de viviendas aumentó un 5,4% el pasado mes de mayo respecto al mismo mes de 2013, hasta un total de 28.124 operaciones, gracias al impulso del mercado de segunda mano, según el INE.

 

FUTURAS VENTAS.  El repunte interanual del mes de mayo es el tercero consecutivo tras los experimentados en marzo y abril, cuando subió más de un 22% y un 5%, respectivamente, poniendo fin a 10 meses de caídas interanuales. 

Y atención para quienes quieran desprenderse ahora de su vivienda usada, ya que la reforma fiscal cambia la tributación de las ganancias patrimoniales, especialmente para inmuebles adquiridos antes de 1994. Según un simulador del periódico Cinco Días, un contribuyente que adquirió un piso en 1976 por dos millones de pesetas (12.020 euros) y ahora decide venderlo y le ofrecen 220.000 euros, con la ley vigente, el vendedor pagará 10.869 euros en el IRPF por la ganancia patrimonial. Sin embargo, a partir del 1 de enero de 2015, el coste fiscal para el ejemplo se eleva a 43.995 euros. Es decir, la diferencia entre vender un piso el 31 de diciembre de este año o hacerlo 24 horas más tarde asciende a 33.126 euros.