Renovarse o morir. No en todos los casos se cumple la frase y hay negocios que se renuevan y no logran superar los avatares de un contexto económico negativo, pero en el sector de la madera, y más en concreto en el de fabricación de puertas y sus accesorios, la adaptación a las nuevas técnicas, sin olvidar la calidad, sí ha permitido sobrevivir a algunas empresas de la provincia. Un caso claro es ‘Cermotec’, empresa de Consuegra especializada en la fabricación de cercos y marcos para puertas que no sólo ha logrado sortear la crisis sino que, y algo no siempre fácil en tiempos de vacas flacas, se ha embarcado en un proyecto pionero que podría suponer un cambio más que notable en lo que abastecimiento de madera para sus productos se refiere. Se trata de la plantación de paulownia, un árbol procedente de China, gran ‘amigo’ del medio ambiente, de más que rápido crecimiento y más barato que otros tipos de madera tradicionales.
Para conocer esta iniciativa, hasta las instalaciones de la fábrica se desplazó la pasada jornada el delegado de la Junta en Toledo, Fernando Jou, quien pudo conocer de primera mano las posibilidades que se abren para el sector de la madera gracias a este árbol, «que reúne todas las garantías de medio ambiente, porque se trata de un clon estéril y, por tanto, no se puede considerar como una planta invasiva. Es un cultivo alternativo que se suma a otros muchos que tenemos en Castilla-La Mancha y es una posibilidad más que, además, lleva aparejada una cantidad de puestos de trabajo en las industrias anejas a estas plantaciones», explicó.
En este sentido, desde el Gobierno regional «instamos a los emprendedores a tener iniciativas como ésta y en esto estamos dispuestos a ayudar a través de varias líneas del IPEX -Instituto de Promoción Exterior-», en lo relativo a la exportación, ya que esta empresa también está abriendo sus fronteras. A este respecto, el delegado de la Junta recordó que el próximo día 25, en Toledo, a través del IPEX, habrá un seminario para analizar las posibilidades de mercado en Alemania, «porque la exportación es una de las salidas para nuestras empresas, no en vano en el primer semestre han crecido un 25 por ciento, con una facturación por valor de 247 millones de euros, de los que aproximadamente la tercera parte corresponde al vino, pero también hay maquinaria, vehículos, plásticos, etc.», manifestó el delegado de la Junta.
Gregorio Hernández, socio de ‘Cermotec’, por su parte, informó que la empresa que gestiona, gracias a un equipo cualificado y que está promoviendo constantemente proyectos de investigación, lleva ya cuatro años con el proyecto de la plantación de paulownina. Empezó con apenas 18 plantas y ya hay 500 en las inmediaciones de la empresa, aunque se está trabajando en colaboración con otras empresas para promover más cultivos de este árbol.
Por el momento, reconoció, aparte de que el árbol aún no está listo para su tala, pese al rápido crecimiento, la plantación no está sirviendo para abastecer de madera a las instalaciones, aunque es precisamente este extremo el que se está persiguiendo con las plantaciones. Empresas colaboradoras de ‘Cermotec’ ya están trabajando con productos como tablas de sky o surf, pero el abanico de posibilidades es muy amplio, incluido el de la fabricación de puertas, que aparte de más asequibles, conllevan otra serie de mejoras como una notable reducción del peso.
«Ahora no nos abastece porque las plantaciones que hay no son suficientes, pero en un par de años los árboles estarán más desarrollados y ya se podrán ir talando para producir», indicó Hernández, que agregó que la apuesta por la calidad, unida a ese trabajo de investigación de producciones alternativas y adaptadas a las diferentes épocas, es lo que ha permitido a ‘Cermotec’ sobrevivir a la crisis. Y es que, como subrayó, «no paramos, siempre estamos investigando».