La portavoz municipal y concejala de Urbanismo, María Rodríguez, recalcó ayer que el proyecto para acondicionar la plaza del Reloj y la calle Corredera se perfilará con la participación de los ciudadanos.

Así lo subrayó tras el encuentro celebrado ayer con vecinos y comerciantes de esta zona, del que salió satisfecha puesto que los comerciantes se fueron «contentos porque han visto la intención que tiene realmente el Ayuntamiento». En este sentido, explicó que se les informó que el proceso del proyecto Urban 10+4 «ha sido participativo siempre»  y «abierto a cualquier ciudadano», como así sigue, recalcó.

La portavoz quiso recalcar que el proyecto «ni siquiera está encargado a los técnicos» y subrayó que «el fin último» del mismo es «favorecer a los comerciantes» y «crear una zona más atractiva» con tráfico más lento para facilitar el acceso de peatones. Rodríguez precisó que este proyecto se suma a otros como la rehabilitación del Salvador y la apertura del Mercado de Abastos para «revitalizar» esta zona comercial.

La próxima cita será una vez esté preparado el anteproyecto para ir perfilándolo. Será probablemente en septiembre cuando se mantenga una reunión con los arquitectos para encargarles el proyecto, una vez que los propios vecinos y comerciantes recaben sugerencias para esta iniciativa.

En lo que respecta a las obras, una vez redactado el proyecto se definirá cómo se puede ejecutar «causando el menor daño a los comerciantes y vecinos».