El alcalde quintanareño hace un resumen de cómo ha transcurrido el mandato que terminará el próximo mes de mayo.

Estamos llegando ya a la recta final de la legislatura. ¿Qué balance hace de este tiempo en Quintanar de la Orden tras su retorno a la Alcaldía?

En Quintanar de la Orden ahora mismo, hemos recuperado nuestra identidad como centro neurálgico de La Mancha y vemos un futuro esperanzador. Hemos soportado una crisis que nos ha afectado de manera severa, pero ahora lo que venga se ve con esperanza desde el trabajo que se ha en la institución más cercana al ciudadano, el Ayuntamiento. Un Ayuntamiento que, cuando llegamos al poder en 2011, tenía una situación de déficit de más de medio millón de euros y ahora tenemos unas cuentas positivas. Esto ha posible con rigor, austeridad y trabajo, trabajo y más trabajo.

Con todo esto ha sido una legislatura en la que se han culminado bastantes proyectos que se venían arrastrando desde hace bastantes años. Recuerdo que mi primera visita tras ser elegido alcalde fue a la Consejería de Educación para desbloquear la apertura del Colegio Antonio Machado, un colegio con más de 500 plazas para niños. En segundo lugar, también hemos terminado la restauración de la Casa de Piedra (mansión solariega del siglo XVII) que ha quedado convertida un Museo Local que es una auténtica maravilla. También podemos hablar del Centro de Mayores que se va a inaugurar en breve , será un centro que podrá atender a las 2.500 personas vinculadas al Hogar del Jubilado. Y no quiero olvidar el Centro de Especialidades Médicas, que se abrió hace unos 15 días.

Todo esto son grandes obras que nos consolidan como cabeza de La Mancha toledana, y cumplen reclamaciones nuestras para una ciudad importante en una comarca importante. Se requerían estos servicios y quiero reconocer que la Junta de Comunidades ha tenido una especial sensibilidad hacia Quintanar y su comarca en temas educativos, sanitarios, culturales... que se ha complementado con la acción del Ayuntamiento.

Estoy razonablemente satisfecho con todo lo que se ha llevado a cabo.

¿Cómo ha funcionado el Consistorio en este periodo?

Bien. He tenido una obsesión porque en el municipio hubiera paz social en este tiempo. En política estamos todos de paso, y me alegró de que en esta legislatura no haya habido ningún incidente con la oposición ni con nadie. Cada uno hemos defendido nuestras ideas, pero con el interés común de defender a nuestros vecinos y su progreso, que es para lo que todos estamos en el Ayuntamiento. Y es destacable esa paz social, y que la oposición también la haya favorecido. Es modélico, más en estos tiempo.

La reactivación de una ciudad depende sobre todo del impulso que la dan los emprendedores ¿Se les han facilitado incentivos para el desarrollo de las iniciativas empresariales?

Podemos decir con la voz muy alta que hemos trabajado en esto. Por ejemplo, el Polígono Industrial de Quintanar, el Alto Losar, es el más barato para instalarse de toda Castilla-La Mancha. Se han bajado impuestos tanto en el ámbito local como a través de convenios con la Junta. Ahora la instalación de toda empresa nueva en Quintanar tiene una bonificación del 95 por ciento en el ICIO y una reducción del IBI del 80 por ciento que marca Catastro.

Ahora no existen más ventajas para una empresa que venirse a Quintanar, sin olvidar su idoneidad como centro geográfico. Estamos a una hora de Madrid, a una hora de Toledo, Cuenca, Ciudad Real o Albacete, y a dos horas de Levante. Nuestra ubicación geográfica es perfecta y a eso sumamos nuestros beneficios fiscales. Es como en la Fórmula 1, si estás bien colocado en la ‘pole position’ tienes más posibilidades de ganar la carrera, y los incentivos fiscales son necesarios para ello.

La buena ubicación de la que habla, ¿también ayuda a Quintanar para convertirse en polo de turismo interior y de eventos como el Campeonato de Caza de 2013?

En el Ayuntamiento estamos colaborando en ello a través de nuestra pertenencia a diversas asociaciones supramunicipales a las que pertenecemos. Por ejemplo, está el programa Leader ‘Dulcinea’ (de gestión de fondos UE para el desarrollo rural) con el que buscamos potenciar las casas rurales y el aprovechamiento turístico de nuestro entorno. Vemos que cada vez viene más gente a pasar su fin de semana a una casa rural en La Mancha y Quintanar se incluye en un circuito comarcal junto a poblaciones cercanas como El Toboso, referencia mundial por su vínculo con ‘El Quijote’, o Villacañas, o Consuegra... A través de las casas rurales y otros establecimientos hosteleros se va a conseguir explotar el atractivo del interior. No sólo tenemos la belleza del entorno sino una gastronomía espectacular, con nuestro vinos, aceites, embutidos, carnes... Esto es muy atractivo para el visitante.

Por otro lado, también pertenecemos a la asociación de municipios de la Orden de Santiago, que está dinamizando la ruta por los monumentos que dejó esta Orden por la zona, incluyendo los de Quintanar.

Estos son proyectos ambiciosos y a largo plazo, pero estamos dando los pasos adecuados para ser conocidos y aprovechar un turismo de interior que cada vez nos deje más beneficios.

 Los nuevos motores económicos no deben hacernos olvidar el motor inicial de toda sociedad, la agricultura. ¿Cómo se  mantiene este sector en Quintanar?

Pues bastante bien. Nuestra cooperativa de vinos, Nuestra Señora de la Piedad, se mantiene como la tercera de Castilla-La Mancha, y nuestro caldos son conocidos no solamente en el ámbito nacional sino también mundial. Ha habido mucha gente que a raíz de la crisis ha vuelto al campo, y de una manera más profesional. En la uva se ha pasado al cultivo de espaldera, a la plantación de distintas variedades y se están consiguiendo vinos que hacen sombra a los de cualquier lugar del mundo.

Volviendo a temas más urbanos, ¿cómo se ha asumido la instauración de la zona azul en esta legislatura?

Se tuvo que tomar una decisión que parecía complicada, pero se determinó instalar la zona azul y la experiencia ha resultado totalmente positiva. Quintanar tiene una vocación comarcal, nosotros vivimos de que los vecinos de pueblos de nuestro entorno puedan acceder a nuestros servicios administrativos y comercios de nuestra localidad. Tenemos que facilitar que esa gente llegue,  y de paso compre. La verdad es que a fecha de hoy los propios comerciantes y los usuarios, entre los cuales me incluyo, están conformes con el aparcamiento regulado.

A esto hay que sumar no el hecho de que la zona azul deje más o menos recaudación, sino que simboliza la transformación de un pueblo en una ciudad. Yo lo expliqué así porque lo veía claro. Y por eso, hemos sumado a esto otras actuaciones, como el asfaltado de toda la zona centro. Se está sumando a una cosa otras como el adecentamiento de calles, algo también necesario para que la gente venga a Quintanar con todas las facilidades del mundo.

En este final de legislatura, ¿están planteados nuevos proyectos desde el equipo de Gobierno?

Yo por lo menos, pienso que el Ayuntamiento debe ser una institución que trabaje pensando más allá de plazos de cuatro años. No obstante, hay que seguir trabajando en el día a día. Hay varios proyectos que los empezamos el 8 de enero, vamos a comenzar con la rotonda de la carretera de El Toboso, se van a empezar también los nuevos proyectos de la avenida de San Fernando y el auditorio Príncipe de Asturias... Estamos ilusionados en seguir haciendo ciudad.

¿Quiere seguir haciendo ciudad renovando su candidatura a la Alcaldía en las próximas elecciones de mayo?

Esa es la pregunta del millón. Pero como diría aquel, será ‘lo que diga mi señora’. Aún no nos hemos planteado nada de esto, estamos trabajando. Yo me considero de infantería y estoy a disposición de lo que diga mi partido.