Acostumbrados a «lanzarse al barro» produciendo espectáculos complejos, costosos y poco habituales en el ámbito de las compañías privadas, Morboria Teatro ha seguido su pasional instinto teatral ofertando una pieza de Agustín Moreto para celebrar como es debido el 400 aniversario de un dramaturgo que, dicho de paso, vivió, escribió y murió en Toledo.
Y puesto que tuvo -el pobre- la mala fortuna de nacer en tiempos de los gigantes Calderón y Lope, su legado ha pasado desapercibido a pesar de ser «uno de los grandes del Siglo de Oro», se ha encargado Morboria de rescatar un texto «de un maravilloso poeta» impregnando de «vis cómica y oficio».
Eva de Palacio y Fernando Aguado visitaron la ciudad en la que residió el homenajeado para presentar el montaje ‘De fuera vendrá quien de casa nos echará’ que, los días 19 y 20 de este mes, subirá «una fiesta barroca» a las tablas del Rojas. Lo hará con su imperturbable sello estético y desde la vocación de reunir en un todo dinámico lo mejor del «teatro, la música, la pintura, la moda y la poesía».
Bajo esta premisa, y con la satisfactoria respuesta lograda en la veintena de espacios por la que ya ha transitado, apreció la directora y actriz que los presentes disfrutarán de una obra que «parece más un musical porque el 90% de la misma cuenta con música en directo» y está secuenciada con danza e intermedios musicales y bailables.
Por ello, y teniendo en cuenta que «el público sale encantado», sobra decir que la compañía es experta en regalar una caracterización, desde el punto de vista literario, perfecta, y un trabajo del verso destacable. Eso a pesar de que, en esta ocasión, apuntó Aguado que el empeño se ha asemejado a «una cruzada» por la manera «en la que hemos tenido que rescatar las palabras antiguas para traerlas a estos días». Situada, la historia, en el seno de una familia española, la trama oferta una serie de personajes muy bien dibujados que van evolucionando en una suerte de «divertido enredo» en el que cita el drama, la comedia y las relaciones tormentosas de carácter amoroso.
Ingredientes esenciales para los que Morboria ha trazado un camino de ida y vuelta - lleno de juego, pasión y engaños- que regresa «a la capa, la espada, el chambergo y las botas». Porque, y tan sólo para desperezar la curiosidad, Chichón el gracioso, Lisardo y el Alférez Aguirre son soldados que vuelven de Flandes taimados y con mucha picardía.
el preferido de felipe IV. De ahí que utilizando el imaginario de Moreto, destacara Eva de Palacio la peculiaridad y posibilidades de un montaje que posee «algo de espía» frente a una casa del siglo XVI en la que «descubrir las costumbres de esa época». Porque el texto del autor preferido de Felipe IV no deja de ser un magnífico vehículo para «aprender cómo fuimos y entender cómo somos».
El equipo burgalés de los Moretianos
Eva de Palacio contextualizó el nacimiento de este proyecto en las jornadas de teatro clásico de Almagro en las que conoció a María Luisa Lobato López. La catedrática de Literatura Española que ejerce su actividad docente, investigadora y de gestión en la Universidad de Burgos, coordina el equipo de los Moretianos, que lleva a cabo el proyecto de edición crítica y estudio de la Obra Completa de Agustín Moreto.
Este trabajo de investigación «realizado por amor a tu oficio» dio pie a Morboria para «apoyar a este equipo y embarcarnos en esta compleja aventura» a pesar de «no ser la Compañía Nacional de Teatro».