Los derrames ilegales a la naturaleza reciben su castigo. Quizá no siempre, pero a veces las autoridades castigan con dureza a los infractores. La Confederación Hidrográfica del Guadiana ha abierto un expediente sancionador al Ayuntamiento de Consuegra por el vertido de tres empresas de la localidad al río Amarguillo. La institución había advertido ya al Consistorio de esta circunstancia, fruto de los derrames de tres empresas de producción de vino.

El Ayuntamiento de esta población perteneciente a la comarca de La Mancha tiene previsto derivar una posible sanción a estas tres firmas señaladas, tal y como figura en una ordenanza municipal aprobada hace unos días ‘ex profeso’ y que sustituía a una anterior de hace unos 60 años.

El concejal de Izquierda Unida en Consuegra, Jaime Ortiz, explicó que estos vertidos de aguas residuales por parte de las explotaciones agroalimentarias se producen porque las firmas no tienen terminada la canalización hasta la depuradora de la localidad y expulsan los vertidos en la época de la vendimia.

«Es una sanción merecida. Ya avisaron en octubre o noviembre de este problema», resaltó al respecto este concejal de Izquierda Unida, quien cifró la posible multa entre los 50.000 y los 300.000 euros. Así, apuntó al Ayuntamiento de Consuegra y a «la inoperancia e ineficacia» de la empresa privada de gestión del agua, Gestagua, como corresponsables de esta situación.

Sin embargo, el alcalde, José Manuel Quijorna, recalca que se trata sólo del inicio de un expediente sancionador y manifestó que han presentado ya unas alegaciones a esta decisión de la Confederación Hidrográfica del Guadiana para que se consideren los vertidos reflejados como leves y no como graves, tal y como así se ha denunciado en un principio. Al respecto, el regidor apuntó que creen que se han producido irregularidades en la toma de las muestras recogidas.

El alcalde apostilló que tienen previsto derivar la posible cuantía económica de una sanción a las tres empresas señaladas como culpables de los vertidos ilegales en el río Amarguillo. Esta decisión será posible por el cambio en una normativa municipal registrado en el mes de abril que databa de los años 50 -por ejemplo, reflejaba sanciones de 700 pesetas- y que ahora se ha adaptado a las reglas fijadas por Castilla-La Mancha, España y Europa relativa a los vertidos ilegales dentro del término municipal.