Pío García Escudero admite que el Senado todavía no responde a la definición de Cámara de representación territorial que le da la Constitución «porque en el 78 no se sabía cómo iba a quedar el Estado de las Autonomías, el número y cuales iban a ser».

La parte positiva es que hoy este reparto territorial es aceptado y ha sido aprobado «por la inmensa mayoría de españoles». Pero en cuanto al Senado falta adaptarlo a esa realidad y saber cómo hacerle de verdad la Cámara territorial. «Se ha intentado, ahora hay una ponencia trabajando, pero al final no hay acuerdo por unas cosas u otras», indica.

En todo caso, recuerda que reformar el Senado requiere modificar la Constitución, «no hay otro camino, y esto necesita la práctica unanimidad o la mayoría como en el 78». Con el tiempo se conseguirá, dice, pero también recalca que la Cámara Alta cumple sus obligaciones de control al gobierno, cámara de segunda lectura de leyes, de reflexión y de aprobación de presupuestos.

Por otro lado considera que podría sacar al Senado del Senado por un día. «Traer un Pleno a Toledo es complicado, pero no veo problema en traer la Mesa, o la Comisión de las Comunidades Autónomas... No sería mala idea», dice.