La próxima temporada de baloncesto se quedará huérfana de Fran Cano. El técnico del CEI ha confirmado que no seguirá al frente del equipo sénior colegial y que no dirigirá ningún conjunto porque quiere tomarse un descanso. «Son muchos años», asegura. En la decisión no ha influido un curso complicado por los problemas para entrenar y que terminó el pasado sábado con una eliminación digna de la fase final de la competición. Según puntualiza, «tengo otros proyectos personales y ya veré cuando vuelva a lo que me dedico; estoy muy agradecido a los jugadores y al club porque a pesar de todas las vicisitudes nunca ha surgido ningún problema».

Cano confiesa que el CEI Toledo es «mi club». Estudió en la Universidad Laboral, jugó allí y estuvo nueve años en diferentes funciones de entrenador. Primero comenzó en el conjunto femenino y pasó por otras categorías hasta hacerse con las riendas del primer equipo masculino. Luego regresó dos años cuando el club capitalino se marchó temporalmente a Bargas y a estas temporadas hay que agregar las dos últimas, con sendas fases de ascenso disputadas. Pero como entrenador, también ha estado ligado a otras entidades importantes de la ciudad y de la provincia como el CB Polígono o el CB Gerindote.

Con la marcha de Cano, todo apunta a que el sénior masculino del CEI se renovará profundamente. Varios integrantes del equipo dejan de estudiar y tendrán que marcharse a otros sitios, mientras que los más veteranos pueden dar un paso a un lado después de una campaña en la que han tenido problemas para compatibilizar sus labores con las sesiones de entrenamiento. En cualquier caso, los detalles se conocerán más adelante y parece que la cantera volverá a jugar un papel primordial por el trabajo de cantera que realiza el club presidido por José Antonio Ahijado.

Así las cosas, es momento también de hacer balance y las deficiencias han terminado por pasar factura al CEI Toledo al final. Aún así, le compitió la semifinal al Fundación Caja Rural La Roda, anfitrión de la fase final del pasado fin de semana. «Dieron lo que pueden dar», dice Cano, que salió «contento» por la imagen que ofrecieron y porque «fácilmente pudimos ganar y nos marchamos con la cabeza bien alta». Entrando en un análisis más profundo del choque de semifinales, ya en el segundo cuarto «nos pasó factura el esfuerzo del principio y tuvimos que tirar de cuestiones tácticas y de experiencia». Aún así, todo se decidió en el último cuarto, donde «dos pérdidas nuestras y su acierto decantaron el partido de su lado». El técnico de los verdes revela además que Marcelo Mazana jugó mermado por un pinchazo en el isquiotibial.