Por un momento, los vecinos de Parrillas temieron que se iba a repetir la catástrofe del pasado mes de julio, cuando un incendio forestal devastó unas 1.000 hectáreas de su término municipal y del de la vecina Navalcán. Pero la historia, afortunadamente, no fue la misma. Un incendio surgido en una zona alejada del casco urbano era controlado a última hora de la tarde-noche de ayer viernes tras quemar unas dos hectáreas de monte bajo.

Así lo confirmaba la alcaldesa de Parrillas, María del Carmen Alfageme, desde el lugar del suceso, un área de encinar situada junto a la cola del pantano de Navalcán y cerca del límite municipal con Oropesa. Según explicó la regidora, el fuego se inició sobre las seis y media de la tarde por causas aún no aclaradas, existiendo la posibilidad de que haya sido provocado.

Alfageme reconoció su inquietud en un primer momento al estar situadas las llamas en una zona de difícil acceso. Sin embargo, los dispositivos contraincendios coordinados por la Consejería de Agricultura desplazaron al lugar, aprovechando las últimas horas de luz solar, tres aeroplanos que iniciaron el apagado del incendio por aire. Por tierra, se sumaron tres vehículos contraincendios con su correspondiente dotación.

«Lo han cogido a tiempo», afirmaba aliviada la alcaldesa sobre las nueve de la noche. Los equipos de tierra ya habían perimetrado el fuego, evitando su avance, y estaban sofocando y refrescando los focos de calor para evitar su reavivamiento, por lo que se esperaba su extinción definitiva en breve plazo.